Un año más, con motivo de la Diada, el mundo soberanista ha exhibido fortaleza con otra movilización multitudinaria, que en esta ocasión cruza la ciudad de Barcelona a través de una Diagonal atestada de banderas esteladas, lazos amarillos y camisetas de color coral patrocinadas por la ANC.
Pasadas las 17.00 horas, siguiendo las indicaciones del actor Toni Albà desde un escenario, los manifestantes han guardado tres minutos silencio, aunque alterado por algunos gritos en favor de la independencia, y, exactamente, a las 17.14 horas se ha lanzado un cohete cuyo estallido ha marcado el inicio de la acción.
Las personas concentradas en el tramo 37, a la altura de la calle Castillejos, han iniciado entonces la "ola sonora", haciendo oír su voz, un griterío reivindicativo que ha avanzando de forma algo caótica y discontinua por la Diagonal, hasta el Palacio de Pedralbes.
Allí estaba instalado un muro metafórico, en alusión a los obstáculos por superar hasta culminar el objetivo de la "independencia", que ha ido cayendo fragmento a fragmento por el simbólico clamor de la gente.
En uno de los extremos de la movilización, donde se ha instalado el escenario para los parlamentos, se han concentrado representantes políticos de las fuerzas soberanistas: JxCat, PDeCAT, ERC, la CUP, Demòcrates y también los comunes.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, y los consellers de su Govern también se han sumado a la marcha de hoy, que pretende ser la primera de una serie de movilizaciones del soberanismo para este otoño con el fin de reclamar la libertad de los presos y el retorno de los "exiliados".