El vicedecano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, Luis Gutiérrez, asegura que Tenerife vive “en un colapso total” en infraestructuras, con una "isla hiperpoblada" y un número de vehículos por habitante que “no tiene parangón”, cerca de 700.000 para una isla de 2.000 kilómetros cuadrados.
Así de rotundo se expresó en el ciclo Movilidad, Transporte y Descarbonización, organizado por la Real Sociedad Económica de Amigos del País de Tenerife, en el que intervino junto a José Luis Delgado, director general de Infraestructuras del Gobierno de Canarias; Raquel Guanche, vocal de Urbanismo del Colegio de Arquitectos, y José Alberto León, director de Movilidad del Cabildo.
Gutiérrez cree que en este colapso influye poderosamente “un déficit de infraestructuras” en la isla, ya que las que existen fueron diseñadas “hace 30 años para tráficos de hace 50”. Por ello aboga por “activar políticas de cambios de uso de movilidad, porque no podemos permitir que 700.000 coches vayan donde quieren todos los días”.
El ingeniero aclara que “el problema se arregla sólo con infraestructuras”, sino “arriesgando” al restringir el tráfico privado y beneficiando el transporte público, puesto que, “si el transporte público tarda lo mismo que privado, nadie lo va a utilizar”. Arguye que Santa Cruz es la única capital de España con aparcamientos no regulados, y, desde su punto de vista, “si dejamos aparcar de manera libre seguiremos teniendo el mismo problema”.
Tenerife, “una ciudad dispersa”
Por su parte, el director insular de Movilidad del Cabildo de Tenerife, José Alberto León, considera que la isla se ha convertido en “una ciudad dispersa, con desplazamientos muy largos desde el lugar de residencia hacia los lugares de trabajo, de estudio u ocio, debido a una mala ocupación del territorio, hecha “sin orden y con un modelo que hace muy complicada la gestión”.
León comenta que, pese a tener dos planeamientos de referencia, el regional desde 2005 y el insular desde 2007, “prácticamente no se ha ejecutado casi nada durante 30 años”. Afirma que no se ha respetado la planificación de la Red Transcanaria de Transporte de 2005, sin sacar proyectos adelante, “y esto nos ha conducido al colapso que tenemos en estos momentos”.
José Luis Delgado, director general de Infraestructuras del Gobierno de Canarias, continúa en ese línea, pues cree que la movilidad en Tenerife está colapsada debido a la deslocalización de los puestos de trabajo con respecto al lugar de residencia y la concentración excesiva de estos en el área metropolitana y el sur de la Isla. Un modelo, según cree, que solo puede funcionar disponiendo de “vías de alta capacidad rápidas que permitan acortar los tiempos de desplazamiento”, y aquí esas vías se utilizan “como vías colectoras”.
Raquel Guanche, vocal de Urbanismo del Colegio Oficial de Arquitectos, opina que “el modelo disperso del territorio está totalmente arraigado en nuestra cultura”, con varios coches en cada núcleo familiar. A esto se suma el incremento de población y de turistas. Según ella, este incremento poblacional y la centralización de los lugares de trabajo y ocio son los responsables de la saturación actual de la movilidad.
Transporte público
Para José Luis Delgado Tenerife tiene la red de carreteras “más infradotada” del Archipiélago por “no haber desarrollado las redes viarias del sur y norte de la isla”, si bien cree que cuando el Anillo Insular esté operativo se descongestionará el tráfico de manera evidente y entonces se podrán aplicar “políticas de fomento del transporte colectivo”, dijo antes de recordar que la Ley establece que toda ciudad con más de 50.000 habitantes debe tener transporte público, pero, en este momento, solo dos municipios, Santa Cruz y La Laguna, disponen de él, “por lo que la estructura del transporte público está soportada por el Cabildo”.
Advierte que, de las 69 obras prevista en el Convenio de Carreteras, dotado con 1.200 millones de euros (“cantidad absolutamente insuficiente”), no se podrán ejecutar ni la mitad, pues “no hay dinero para ejecutar el otro 50%”.
Aparcar en Santa Cruz
Delgado tiene claro que en Santa Cruz “tenemos uno de los mejores intercambiadores de transporte” pero su parking “nunca está ni al 50%” porque “si no hay permeabilidad entre el transporte colectivo dentro de las ciudades no es cómodo para el usuario y no lo va a usar”.
Luis Gutiérrez añade que el intercambiador está libre porque “la gente puede aparcar gratis en la ciudad […] Vamos muy atrasados en políticas de regulación de aparcamientos y en potenciar el transporte público”.
La realidad es que, según han detectado las encuestas realizadas por el Cabildo, el 80% de los tinerfeños dice que “mientras puedan aparcar cerca del trabajo van a ir en su coche”. Por ellos considera el director de Movilidad del Cabildo que el primer paso debería ser limitar el tiempo de estacionamiento en las zona centro a los no residentes.
Raquel Guanche añade en este punto que los requerimientos de la Unión Europea para ciudades de más de 50.000 habitantes van a obligar a la regulación de los aparcamientos, “un problema que nos va a comer”, según Luis Gutiérrez.
Infraestructuras pendientes
El director general de Infraestructuras insiste en que, cuando se cierre el Anillo Insular en un plazo de cuatro años, como calcula, “desde La Laguna hasta la comarca suroeste se tardará lo mismo por el norte que por el sur, y eso hace que el tráfico sea infinitamente más fluido para los 100.000 vehículos que atraviesan el punto más conflictivo, que es la zona de Padre Anchieta”.
Cuestionado sobre la posibilidad de que se construyan los trenes del sur y del norte, Delgado sentencia que, antes de implantar el tren, hay que terminar la red de carreteras y advierte que “aunque lo financiase los Presupuestos Generales del Estado, después hay que mantenerlo con recursos propios”.
En relación con la efectividad de las infraestructuras previstas, el director insular José Alberto León confirma que una simulación realizada en el Cabildo da como resultado que, una vez construido todo lo planificado, “se quedaría un pequeño punto negro en el tramo Santa Cruz-Laguna, pero desaparecerían los atascos” tal y como los conocemos hoy en día, aunque asegura que si no se construyen las vías pendientes no se podrá hacer el carril bus-VAO en la TF-1 y en la TF-5, tal y como está previsto.