Esta semana diferentes farolas y esquinas de la zona de la Hornilla, así como en otras, del municipio de Candelaria, han aparecido impregnadas de azufre en sus zonas de contacto con el suelo como medida de ataque -o de defensa según se mire- frente a los orines de los perros.
Una acción que ha generado controversia y ha dividido a candelarieros y candelarieras, sobre todo a raíz de la respuesta del propio Ayuntamiento de Candelaria, quien ha publicado que han abierto una investigación ante esta ejecución por cuenta propia de un ciudadano o ciudadana en espacios públicos.
En este sentido, una vecina del pueblo tinerfeño ha asegurado en redes sociales que vio a una señora “poniendo en las farolas y en las esquinas azufre” y opinó que “es está claro que Candelaria está sucia, pero esta no es la manera de hacer las cosas ya que está poniendo en peligro a los perros y a cualquier niño que lo pueda tocar”.
División de opiniones
A partir de aquí muchas han sido las voces que se han pronunciado en uno u otro lado de la medida individual de esta persona. “Al final la culpable va a ser la señora que echó el azufre y no los dueños de todos los perros que permiten que sus mascotas tengan el municipio podrido, que no hay una cera que no esté manchada”, expresó otro residente. “Para las que llevan los perros que cagan y mean y no recogen las cacas, a esas nos las ve nadie, para esas no hay fotos. La pobre mujer. Nada de ver una Candelaria que huele a puro orín de perro”, comentó otra de las ciudadanas en un debate que ya ha generado casi 200 comentarios.
Del lado de la denunciante se pueden leer textos como “ve a la Guardia Civil a poner una denuncia porque eso está prohibido. Es un riesgo para la salud pública” o “Ojo, que puede intoxicar a un niño, por ejemplo, entiendo que tendrá alguna responsabilidad”, entre muchas otras opiniones, donde generalmente se critica una supuesta suciedad de la ciudad.
Investigación del ayuntamiento
En este contexto y ante el revuelo surgido, el propio Ayuntamiento de Candelaria ha emitido un comunicado donde quiere dejar claro que no tiene ninguna relación con este suceso y confirma que ha iniciado una investigación “para identificar a la persona o personas responsables de esta acción”.
Asimismo, han compartido que “ante esta situación, se ha dado la orden a la empresa encargada de la limpieza viaria de proceder a la eliminación inmediata del azufre de las zonas afectadas, con el objetivo de garantizar la seguridad de todos los ciudadanos y sus mascotas”.
Sin embargo, la administración municipal ha alertado a la población de que se siguen detectando nuevos casos de esparcimiento de azufre. “Por ello, solicitamos la colaboración de todos para denunciar cualquier acto de este tipo a través de los canales oficiales y que se indique al consistorio los puntos exactos para poder proceder a su eliminación con mayor rapidez, a medida que se detecten”.
Una práctica habitual: ¿está prohibido el azufre?
La práctica de echar azufre en la vía pública no es nueva en Candelaria y ha sido habitual en los últimos años, siempre como iniciativa propia vecinal, por todo el país. En un caso similar ocurrido en Córdoba, y a pesar de su uso, la Policía Nacional aclaró que “el azufre no evita que los perros orinen en tu acera. Además, está prohibido y es tóxico para animales y para nosotros ¡Paremos costumbres absurdas!”.
Realmente el azufre no está prohibido. Lo que no está permitido es su esparcimiento en la vía pública. Usualmente, el azufre se utiliza para erradicar el pulgón en las plantas, pero, aunque en este contexto sea legal, es una sustancia dañina y debe ser utilizada con precaución.