Trabajadores de Metrotenerife, empresa que gestiona el tranvía de Tenerife, han colocado en la mañana de este lunes carteles en las cabinas de varios convoyes alertando a los viajeros de la presencia de polvo de sílice en suspensión al paso del vehículo.
El polvo de sílice es una sustancia cancerígena utilizada en el sistema de frenado de los tranvías y que ha provocado silicosis a por lo menos siete trabajadores de la empresa, según informó a Atlántico Hoy el secretario del comité de empresa, Jonay Acosta, el pasado mes de julio.
A juicio contra la empresa
Aunque las pruebas para sustituir esta arena por otro elemento que no sea perjudicial para la salud comenzaron en verano, los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT) anunciaron el pasado viernes que habían iniciado los trámites para llevar a Metrotenerife a juicio por "la falta de voluntad" para acabar con el problema.
Sobre la acción tomada este lunes de colocar carteles en las cabinas de los convoyes, los trabajadores han pedido a los viajeros que se "protejan" al paso de los tranvías, especialmente si son personas sensibles a padecer enfermedades. Añaden que "no es alarmismo", sino "responsabilidad".
La dirección ordena retirar los carteles
No obstante, tal y como han expresado en su cuenta de X (antes Twitter), los carteles apenas han durado unas horas debido a que la dirección de la empresa habría dado "la orden directa de quitar los carteles de cabina bajo amenaza de sanción".
Atlántico Hoy ha consultado a Metrotenerife sobre estas declaraciones de los trabajadores del tranvía. La empresa ha expresado a este medio que "está prohibido colocar ningún tipo de cartel que no esté autorizado por la empresa", e insiste en que esta política es común a otras compañías.