El Cabildo de Tenerife suma 11 nuevos municipios a los cuatro ya participantes en el proyecto de comunidades circulares de compostaje y vermicompostaje. Los representantes de los municipios de Arico, La Victoria de Acentejo, La Orotava, Icod de los Vinos, Vilaflor de Chasna, Santa Úrsula, Garachico, Granadilla de Abona, Santiago del Teide, Guía de Isora y Puerto de la Cruz han mantenido una reunión con el consejero de Desarrollo Sostenible y Lucha Contra el Cambio Climático, Javier Rodríguez para esbozar la hoja de ruta para la puesta en marcha de nuevas zonas de compostaje, en la que también participaron los concejales de La Laguna y Tacoronte que ya participan de este proyecto.
Ante el éxito de las Comunidades Circulares en el proyecto piloto, iniciado en 19 zonas de compostaje y vermicompostaje en colaboración con la Universidad de La Laguna y con los ayuntamientos de La Laguna, Tacoronte, Tegueste y El Rosario, Rodríguez animó a los municipios asistentes a “impulsar de forma decidida, estrecha y conjunta, la puesta en marcha de nuevas instalaciones para el tratamiento descentralizado de los residuos orgánicos”, y se comprometió a redoblar esfuerzos para que se implante en el resto de los municipios de la isla.
El cabildo pondrá medios y los ayuntamientos el suelo
En la reunión, en la que ya se plantearon algunas de las distintas posibles ubicaciones, el consejero apuntó que el Cabildo aportará los medios materiales y técnicos, así como la formación y el asesoramiento al personal municipal para su implantación en pocos meses, siempre antes de que acabe el año.
Por su parte, los ayuntamientos se comprometieron a poner a disposición el suelo público necesario, así como a fomentar la participación social ya que, estas Comunidades Circulares, generan sinergias en el tejido social de los municipios, dinamizando así la participación y la sensibilización ciudadana, además de tener un efecto multiplicador en la lucha contra el cambio climático para alcanzar los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS).
Apuesta por el kilómetro cero
En combinación con el quinto contenedor, el Cabildo quiere apostar firmemente por el ‘kilómetro cero’ de la gestión de los residuos orgánicos para que, lo que se genere, se maneje y se aproveche en el mismo entorno, lo que significa minimizar enormemente el elevado coste ambiental del transporte y elevar al máximo la práctica de la Economía Circular, ya que el compost resultante acabará en los huertos urbanos públicos, parques y jardines, y fincas del propio municipio”, apuntó Rodríguez.
Entre las 200 familias participantes y los pequeños aportadores (comedores escolares y universitarios, mercados, huertos urbanos…) son ya casi 600 personas en cuatro municipios las que han aportado más de 6.000 kilos de materia orgánica.