Las piscinas naturales de Los Abrigos son un lugar clave en su visita a Tenerife para quienes disfrutan del buceo. Situadas en el pueblo del mismo nombre, en el municipio de Granadilla de Abona, son una gran opción para disfrutar de la flora y la fauna marinas de esta zona.
Los charcos naturales
La visita a estas piscinas salvajes merece mucho la pena por lo impresionante de sus paisajes. Para ello es preciso seguir un camino de arena y roca, junto a una plantación de plátanos ubicada a unos 100 metros de la localidad de Los Abrigos.
Al final de esta senda, habrá que dejar el coche y descender por las rocas en el punto debidamente señalizado. Una vez en el lugar, el viajero descubrirá varias piscinas, todas ellas de diferentes colores, jugando con los tonos amarillos, verdes y azules. Para facilitar el baño, el charco más grande ha sido habilitado con una escalera de acceso.
Hay que tener en cuenta que estos charcos naturales no son un lugar adecuado para niños, ni tampoco para nadadores poco experimentados. De hecho, hay quienes se desplazan al lugar sin la intención de tomar un baño, solo para sacar fotografías y disfrutar de las vistas.
Buceo en Los Abrigos
Siguiendo el recorrido indicado, es fácil llegar a las piscinas naturales, a las que se accede a través de un arco. Un baño en las mismas permite contemplar con detenimiento los tragaluces de sus paredes. Este espacio es una alternativa muy interesante tanto para la práctica del snorkel (muy común en Tenerife, con varias localizaciones impresionantes en las que llevarlo a cabo) como para el buceo. Y es que allí se puede contemplar un gran número de especies submarinas autóctonas: desde pulpos y sepias al chucho amarillo, los angelotes, las anémonas, las cigalas canarias o las morenas, entre otras.
También es posible llevar a cabo inmersiones profundas en las inmediaciones de las piscinas de Los Abrigos, a su izquierda. En esos fondos arenosos se pueden encontrar grandes cantidades de anguilas jardineras, además de estructuras prismáticas de piedra volcánica con formas naturales de lo más sorprendentes. Si se siguen, es posible llegar a una pequeña cueva en la que habitan roncadores y besugos.
La zona opuesta, al lado derecho de las piscinas, es menos profunda. Sin embargo, sumergirse en ella permite observar cuevas de roca volcánica, refugios de la fauna y flora de la zona. Aquí hay anémonas grandes que sirven de cobijo y alimento a bambas, gambas pequeñas o cangrejos araña, por ejemplo. No obstante, hay que tener en cuenta que a veces hay mar de fondo. Se aconseja tener siempre en cuenta la previsión meteorológica siempre antes de sumergirse.
Otros lugares de interés en la localidad de Los Abrigos
Además de ser uno de los lugares más recomendados para el buceo en Tenerife, la localidad de Los Abrigos cuenta con un buen puñado de opciones para el turista. No hay que dejar de recorrer el pueblo en sí, con sus calles adoquinadas. También merece la pena la visita a la Lonja de Los Abrigos o el mirador, parajes singulares con un encanto especial.
Por supuesto, en los alrededores existen zonas en las que tomar el sol y darse un baño, además de locales para disfrutar del ocio diurno y nocturno. Sin duda, las piscinas naturales de Los Abrigos se han convertido por derecho propio en toda una atracción para el turista.