La justicia declara culpable la quiebra de la empresa tinerfeña Viviendas Unifamiliares GPU

Los tribunales inhabilitan durante tres años al exadministrador Diego Pérez Ongoz

Guardar

Imagen alusiva a un edificio en construcción en Canarias / EFE
Imagen alusiva a un edificio en construcción en Canarias / EFE

El Juzgado Mercantil número 2 de Santa Cruz de Tenerife ha sentenciado que es culpable el concurso de acreedores presentado en 2020 por la compañía Gestión y Promoción de Viviendas Unifamiliares GPU.

En consecuencia, declara como persona afectada por tal calificación a Diego Pérez Ongoz, que ejerció de administrador único hasta el hundimiento de la entidad. Esta ya cerró sus puertas y se encuentra ahora en proceso de liquidación.

Asimismo, el juzgado ha resuelto inhabilitar a Pérez Ongoz para administrar bienes ajenos y representar a otras personas durante un periodo de tres años. Si llevase a cabo tales actividades ahora prohibidas, incurriría en un delito de desobediencia grave a la autoridad, sancionado con multa y prisión.

Más puniciones

Además, el juzgado condena a dicho empresario a la pérdida de cualquier derecho que le pudiera corresponder como acreedor frente a la empresa fallida, a la devolución de los bienes que hubiera percibido indebidamente y al pago a la masa de 2.360 euros en concepto de daños y perjuicios ocasionados por la infracción de sus deberes legales.

Gestión de Viviendas Unifamiliares GPU se fundó en 1997 para realizar obras de construcción de edificios y habitáculos. Antes de entrar en bancarrota, su volumen de negocio anual rondaba el medio millón de euros. El domicilio social de GPU se encuentra en la avenida de Anaga número 21, de Santa Cruz.