En un momento en el que la producción de energía eléctrica a través de las renovables es de vital necesidad para la descarbonización, la isla de Tenerife ha mantenido durante al menos siete meses dos parques eólicos totalmente parados. Los parques Areté (18,4 megavatios) y La Roca (16,8 MW), situados en Arico, dejaron de inyectar energía a la red en julio de 2022 y todavía no hay respuestas de cuándo volverán a funcionar, aunque las pérdidas ya se calculan en 8 millones de euros.
La falta de una solución y el pasar de las responsabilidades entre el Cabildo de Tenerife y la empresa Iberdrola ha motivado que el grupo de Coalición Canaria (CC) haya solicitado un pleno extraordinario para rendir cuentas ante lo que consideran una “mala gestión” del ITER por tener constancia de los fallos en sendos parques y no haber dado una solución.
Sin asumir la responsabilidad
Tanto en septiembre como en noviembre CC llevó preguntas al pleno del Cabildo al respecto. Entonces tanto el presidente del ITER y del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, y el vicepresidente del Cabildo y por entonces también responsable del ITER, Enrique Arriaga, aseguraron que la responsabilidad era de la empresa Energías Ecológicas de Tenerife (participada por Iberdrola y empresarios tinerfeños) y que esta debían solucionar el problema.
Sin embargo, una noticia del medio Canarias Ahora contradice esta versión e informa de que Iberdrola señaló en diciembre que la avería proviene de “problemas de mantenimiento en la instalación de conexión gestionada por el ITER”, según cita el medio. La información que ofreció el Cabildo en noviembre aseguraba que el fallo se dio en una subestación que gestiona EET. Bajo esta hipótesis ninguno de los parques conectados a la subestación estarían en funcionamiento, pero no es así.
Parques eólicos sin mantenimiento
El parque Chimiche II, de EET, ha mantenido su funcionamiento todos estos meses y ha podido inyectar energía a la red. Este hecho para CC refleja que el grupo de Gobierno insular mintió en el pleno al no asumir la responsabilidad de la paralización y señalar a Iberdrola. “Si no está bien cuidada y no está mantenida tenemos que hacerla responsable”, comentó en noviembre Martín, y añadía que “nosotros no podemos entrar en una instalación privada, que tiene que prestarnos unos servicios y que no lo está haciendo y que por lo tanto genera un quebranto en la actividad del ITER”.
Este argumento no concuerda con lo que dicen Iberdrola y CC. La energética ha asegurado que ha sido la falta de mantenimiento la que ha provocado la paralización de los parques. Ya en mayo de 2021 un informe trasladaba al consejo de la necesidad urgente de contratar el mantenimiento de los equipos del ITER, tal y como ha explicado el consejero de Coalición Canarias Antolín Bueno en una rueda de prensa conjunta al también nacionalista tinerfeño Félix Fariña. Este documento implica que un año antes de la paralización total ya se instaba al mantenimiento de los parques. Un mantenimiento que, como recalca Iberdrola, es obligación de cada promotor.
Ocho millones de pérdidas
“Entendemos que esta inacción, siendo conocedores del grave riesgo que podría ocasionar el no actuar como se ha producido, es responsabilidad directa del presidente, del consejo delegado y del resto de miembros del consejo de administración que no han tomado la medida necesaria para reducir este daño que se sigue provocando porque los parques a día de hoy siguen parados”, comentó Bueno durante la rueda de prensa.
El cálculo que han realizado desde el grupo nacionalista es que el ITER ha perdido 8 millones de euros tras dejar de generar unos 35.000 megavatios que podrían haber dado energía eléctrica durante todo un año a unas 8.500 familias. Al monto total habrá que sumar las reparaciones en los aerogeneradores de Enercon por los daños provocados motivados de la paralización, ha señalado Bueno.
Consecuencias políticas
Aunque la pelota vaya de un tejado a otro, la hipótesis del consejero de CC es que el señalamiento a Iberdrola se ha saldado con la cabeza del exresponsable del ITER, Enrique Arriaga. El consejero de Ciudadanos dimitió de su puesto en diciembre sin prácticamente información al respecto. “Nos consta que la dimisión de Arriaga viene motivada, entre otras cosas, por la paralización de los parques y las posibles responsabilidades que podrían motivarse”, indican desde CC.
Aparte de los parques eólicos parados, desde el grupo nacionalista han señalado que la situación en general del ITER tiende a la inacción. Lo dicen porque el Instituto no habría sumado nueva potencia a su capacidad al no postularse a las subastas públicas ni al poner en marcha nuevos proyectos. A su vez denuncian que las viviendas bioclimáticas instaladas en el complejo continúan abandonadas al tener una plaga de termitas e, incluso, dudan de la versión del Cabildo sobre el fracaso de poner en marcha en Tenerife la primera hidrogenera de Canarias debido a un fallo de la empresa productora.
Huida de trabajadores
A toda esta situación se suma, tal y como comentó Fariña, a que les consta que una carta del comité de empresa en septiembre de 2022 señala a recursos humanos la constante pérdida de trabajadores en el ITER, que aseguran llega ya a los 30 empleados que han abandonado el Instituto. Según leyó el consejero nacionalista, la carta decía: “No podemos dejar la ocasión de citar expresamente la pérdida de capital humano que continuamente venimos sufriendo, especialmente en cuanto a personal técnico, lo que está llevando al sobreesfuerzo continuado del resto de personal que continúan en la empresa. Esto está poniendo en riesgo tanto el desarrollo de futuros proyectos como el cumplimiento de objetivos estratégicos”.
El próximo martes será el turno del grupo de Gobierno del Cabildo de Tenerife de explicar por qué se mantienen cerrados los parques, de quién fue la responsabilidad, cuándo se solucionará y el por qué su versión contradice a la versión de Iberdrola.