Un zumbido molesto suena cerca del oido de un comensal en el restaurante de una importante cadena de hoteles del sur de Tenerife. El gerente, harto de las quejas, decide poner fin a la plaga de moscas llamando a una empresa para fumigar el hotel entero y su perímetro. Como en esta situación, decenas de otros establecimientos a lo largo del mes de octubre han contactado a fumigadoras para acabar con los insectos, que desde hace un mes hacen extremadamente molesta la habitabilidad de muchos negocios del sur de la isla.
Teneplagas, una de estas compañías, ha recibido en solo un mes el triple de llamadas que en la misma época del año anterior. Su propietario, Oliver Casañas, explica a Atlántico Hoy que todos los años hay un pico en la reproducción de las moscas que coincide con la época de abono. Pero esta vez no tiene que ver con el estiercol: los campos se abonan a mediados de noviembre y estos insectos llevan molestando desde finales de septiembre.
Se alarga el ciclo reproductivo
¿Por qué? Oliver explica que el alargamiento de las altas temperaturas en meses más otoñales está favoreciendo que se alarguen los ciclos reproductivos de las moscas. Todo sumado a que el paso de la tormenta tropical Hermine por Canarias dejó mucha humedad en las islas, generando unas condiciones idóneas para las larvas de estos insectos.
Silvestre de León, técnico de la empresa, explica en un artículo en la web de Teneplagas que "el problema viene porque las temperaturas en Canarias estan tardando mas tiempo en bajar y esto hace que las moscas tengan mayor tiempo de reproducción". "Las moscas, actualmente, se estan reproduciendo mas veces” afirma.
El triple de llamadas y doble de contrataciones
Desde entonces, en Teneplagas no para de sonar el teléfono. "Estas ultimas semanas nos han llamado muchos restaurantes, hoteles para realizar fumigaciones de moscas en Tenerife. Al principio pensábamos que era algo puntual, pero a medida que pasaban las los dias, las semanas vimos que era algo que persistía y las llamadas solicitando tratamiento para moscas eran incesantes", explican desde la empresa.
Oliver detalla que, aunque se han recibido el triple de llamadas que otros años, se han traducido en el doble de contrataciones, pues muchos potenciales clientes finalmente no se decantan por la fumigación. Su cliente más grande fue, precisamente, una cadena de hoteles del sur de Tenerife a la que le fumigaron hasta las plantas.
"La mosca, al llegar a la planta en el perímetro del hotel, se marea y acaba muriendo antes de entrar en el establecimiento", cuenta el propietario de Teneplagas. La empresa, que también hace control de plagas de otras especies de insectos y hasta roedores, indica que la carga de trabajo derivada de las moscas les ha llevado a tener que posponer algunos controles de otros animales.
También en otras islas
Teneplagas también hace fumigaciones en Lanzarore, Fuerteventura y Gran Canaria, donde han notado otro aumento de las llamadas por la plaga de moscas, aunque destacan que en menor nivel que en el sur de Tenerife. Del norte, por el contrario, no han recibido ninguna solicitud.
Aunque este mes de octubre ha sido algo fuera de lo normal, Oliver Cazañas sí reconoce que, en los últimos años, esta habiendo cada vez más plagas de diferentes insectos. Otra muy comun en el sur de la isla es la cucaracha alemana, que según el propietario de Teneplagas está aguantando mejor los insecticidas porque se ha tenido que reducir la potencia de estos para reducir su impacto en el ser humano.