El Cabildo de Tenerife ha adjudicado el contrato para el mantenimiento y conservación de los sistemas de reutilización y desalación de la isla por valor de 8.774.080 euros. El convenio tendrá una extensión de tres años, con la posibilidad de prorrogarse hasta los cinco años.
El consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, Javier Parrilla, asegura en la nota que este contrato garantizará el mantenimiento de las instalaciones y conducciones de transporte del sector agrícola. “Es un hito poder contar después de más de 30 años con un contrato que incluya la conducción de aguas regeneradas desde Santa Cruz hasta Valle de San Lorenzo, ya que en estos últimos años se han producido varias roturas”, añade.
Parrilla considera que mejorar la calidad del agua agrícola es mejorar la productividad de los cultivos, “por eso, la línea de trabajo que nos hemos propuesto, es seguir mejorando nuestras infraestructuras, estableciendo los mantenimientos adecuados para garantizar el acceso al agua agrícola de calidad”, concluye.
"Instalaciones vitales"
El contrato ha sido adjudicado, a través de la empresa pública Balsas de Tenerife (Balten), a la UTE Técnicas de Desalinización de Aguas S.A. (Tedagua) y Syocsa-Inarsa S.A., prestará servicio a lo que considera el consejero "varias instalaciones vitales" para Tenerife”, como la estación de regeneración para el tratamiento terciario de aguas depuradas y estación de bombeo de aguas regeneradas, en Santa Cruz de Tenerife.
También prestará servicio a la conducción de transporte de agua regenerada de Santa Cruz al sur de la isla; la estación desaladora de aguas regeneradas del complejo hidráulico de Valle de San Lorenzo, en Arona; la estación desaladora de aguas regeneradas en el Sistema de Tratamiento Adeje-Arona; y la estación desaladora de aguas blancas del complejo hidráulico de Isla Baja, en Buenavista del Norte. El consejero insular recuerda que a través de este contrato se dará continuidad al servicio de suministro de agua regenerada para riego en el sur de la isla que comenzó a funcionar hace 30 años, “y que, gracias al avance tecnológico y la experiencia acumulada, cada vez aporta un agua de mejor calidad para su uso final, incrementando los recursos hidráulicos de la zona gracias a la reutilización de agua”.