Utilizaba el nombre de una persona fallecida con el fin de aprovecharse de las bonificaciones asociadas al mismo por la antigüedad en su permiso de conducir
También se culpa al comisario de usar un coche policial para su disfrute particular y no dejar que ningún otro agente lo pueda utilizar incluso cuando él no está de servicio
Nueve personas fueron identificadas como los responsables de los talleres y han sido denunciadas tras carecer de la licencia otorgada por el Ayuntamiento