El pasado 5 de octubre la Guardia Civil llevaba a cabo una operación contra la trata de seres humanos simultáneamente en Gran Canaria y Lanzarote. A raíz de esa actuación, nueve personas acabaron detenidas y una mujer se encuentra ya en la cárcel tras pasar a disposición judicial ante el Juzgado de Instrucción número 1 de San Bartolomé de Tirajana.
Según los documentos relativos a las pesquisas efectuadas por la Guardia Civil y a los que ha tenido acceso Atlántico Hoy, la investigación da comienzo el 24 de marzo de 2023, cuando una mujer extranjera tuvo que ser auxiliada porque estaba siendo agredida por cuatro hombres en Vecindario, Gran Canaria.
Red de trata
La mujer relató a los agentes que la salvaron que estaba siendo explotada sexualmente y que la agredieron porque no había cumplido las expectativas de su explotador. Además, les contó que había una red que se dedicaba a la trata de seres humanos en diversos lugares de España, entre ellos Canarias, y que las víctimas tenían unas durísimas condiciones de como vida con multas de 50 euros si salían más de hora y media de las casas y con disponibilidad 24 horas al día, siete días a la semana. Los agentes lo describen como "jornadas de prestación de servicios que rozarían la esclavitud, al deber la persona explotada estar allí todo el día sólo a expensas de la llegada de clientes".
Como denunciante, explicó a los investigadores que durante un tiempo ejerció la prostitución en un lugar conocido como Casa Alicia, en la calle Puerto Rico de Arrecife (Lanzarote). Allí, conoció a otra joven, que le dijo que estaba en ese lugar por una deuda contraída con la “gerente” de la casa. Según su declaración, le contó que la “gerente” tenía contacto con personas que realizaban el reclutamiento de chicas en sus países de origen, principalmente, Colombia, a las que pagaban los billetes de avión para llegar hasta España y que después eran trasladadas a pisos.
Hacinamiento
Asimismo, le comentó las pésimas condiciones laborales a las que estaban sometidas con largas jornadas de trabajo, penalizaciones y con 20 chicas compartiendo una estancia, con literas para dormir y de las que se aprovechaban por sus problemas económicos.
La denunciante también declaró que vio como los servicios sanitarios tuvieron que asistir en varias ocasiones a la conocida como Casa Alicia para atender a alguna de las mujeres que había sufrido una sobredosis de cocaína.
"Como cromos"
La Guardia Civil ha conseguido verificar todos los datos denunciados, a la vez que ha detectado un elevado número de anuncios donde se ofrecen acompañamiento de mujeres, pero evitando en todo momento el lenguaje relacionado con el sexo o el ejercicio de la prostitución. Los investigadores también han descubierto que las mujeres eran intercambiadas “como si fueran cromos en las distintas plazas a través del territorio nacional”.
En general los datos que maneja la Guardia Civil son tremendos. Han llegado incluso a encontrar una libreta con anotaciones contables en las que una de las mujeres explotadas llegaba a facturar hasta 2.510 euros por ocho horas de trabajo.
Listado de precios
Además, se ha hallado una lista de los precios que debían pagar los clientes por 15 minutos, 20 minutos, media hora, una hora o dos horas con las mujeres, que van desde los 30 euros hasta los 260 euros.
Las conclusiones de la Guardia Civil son rotundas y demoledoras contra la “gerente” de Casa Alicia. “Con todo lo averiguado, se demuestra que O.S., más conocida como `Alicia´, de manera meditada y dentro de una clara organización de tareas concertada con otras personas, mediante la publicación de anuncios en páginas de contacto, donde se cosifica y trata a seres humanos como ganado, ha estado creando falsa expectativas de una visa y futuro mejor a mujeres que posteriormente son empleadas de otras personas que se aprovecha del control atípico o inexistente que hay sobre el tipo de lugares que son hoy los piso reconvertidos a algo similar a un local de alterne…”.
La Guardia Civil acusa a los implicados de ser los presuntos autores de los delitos de trata de seres humanos, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal.