Tras el boom del teletrabajo a causa de la pandemia de la COVID-19, actualmente el 67,5% de las personas que han utilizado esta fórmula laboral en Canarias en los últimos dos años está bastante o muy de acuerdo con ella, porque considera que mejora la conciliación familiar, según la Encuesta de Hábitos y Confianza Socioeconómica (Ecosoc) del Instituto Canario de Estadística (Istac).
En este contexto, el estudio aclara que los porcentajes no son homogéneos por sexos: un 46,9% de las mujeres está completamente de acuerdo frente al 24,8% de los hombres.
Renuncia de oportunidades
Asimismo, más del doble de mujeres (45,2%) que de hombres (23,1%) encuestados afirman que tener menores en el hogar les ha conducido a renunciar a oportunidades laborales.
Los datos recabados también muestran que un 54,2% aseguran renunciar a tiempo de ocio, formación o descanso por atender a la familia y al hogar, con un porcentaje algo superior entre las mujeres (57%) que entre los hombres (51,3%).
Tareas del hogar
Con respecto a las tareas del hogar, si bien en un 68% de los casos se hacen de forma compartida, un 23% de las mujeres afirman dedicarse solas frente a un 9,1% de los hombres.
En promedio, se dedican unas 22 horas semanales a estas labores, aunque las mujeres trabajan unas 26 horas de media frente a las 18 de los hombres, según la encuesta del Istac. El cuidado de los menores también se lleva a cabo mayoritariamente de forma compartida, con un 58,4% de los casos.
Cuidados en solitario
Por otro lado, un 18,9% de personas encuestadas afirma dedicarse en solitario a estos cuidados, aunque el 23,5% de las mujeres son las cuidadoras principales de los menores en solitario frente a un 13,9% de hombres, según reflejan los datos.
Más de la mitad de las personas encuestadas asegura no haber tenido ninguna dificultad para compaginar la vida laboral con la familiar y personal, o esta dificultad ha sido poca.
Las medidas de conciliación que presentan más problemas son la flexibilidad tanto de horarios en general como de entrada y salida del trabajo. No obstante, un 60,6% de las personas ocupadas consideran que las empresas no están comprometidas con la conciliación de la vida familiar y laboral, porcentaje que sube al 67,2% en el caso de las mujeres.