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Sociedad

La solidaridad de dos comunidades podría aumentar a 600 los menores repartidos

En julio, las comunidades acordaron el reparto de 400 menores pero Galicia y Castilla y León se han ofrecido a acoger a más si fuera necesario

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Algunos de los hombres que viajaban en un cayuco con 165 personas a bordo, entre ellas 13 menores y 7 mujeres. / EFE

Los presidentes autonómicos de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y de Galicia, Alfonso Rueda, se han ofrecido a acoger a más menores migrantes tutelados por Canarias de los acordados en la última reunión sectorial si fuera necesario. De esta forma, el número de menores que se repartirían entre las comunidades ascenderían de los 400 acordados a 600, según ha apuntado este miércoles el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo. 

Tras la celebración de la reunión sectorial en julio, Clavijo ha asegurado que la distribución de los 400 menores se está cumpliendo "cada comunidad a su ritmo". Canarias tutela a unos 5.000 menores no acompañados, lo que ha llevado al límite a las organizaciones que trabajan en los centros de menores. Desde hace un año que desde el Gobierno canario se apela a la corresponsabilidad de las comunidades para atender a los menores, por lo que el presidente canario ha agradecido que haya comunidades como Castilla y León o Galicia que se han ofrecido a acoger a más niños. 

Una respuesta digna

Durante una visita al Hospital Universitario de Canarias, Clavijo también ha recordado que muchos de los menores que están en el sistema cumplen los 18 años sin tener su documentación. "¿Qué hacemos con ellos? Los dejas en la calle sin papeles, no pueden trabajar, no pueden ni siquiera salir de Canarias en un avión.", se ha preguntado Clavijo, que ha recordado que se ha realizado un refuerzo de personal en el Gobierno de Canarias para gestionar esos expedientes con más celeridad.

Clavijo ha apuntado además que se debe escolarizar a todos los menores y empadronarlos y que, por su bienestar, no se les puede mover de un lado a otro en mitad de curso. "No puedes sacar a mitad de curso a un menor que acaba de llegar y que llega con un trauma y separarlo de sus compañeros y llevarlo a otro sitio desconocido para generarle otro trauma más", ha ahondado Fernando Clavijo, en declaraciones recogidas por Efe

Reunión con Sánchez

Clavijo tiene previsto reunirse el próximo viernes con el presidente de España Pedro Sánchez para abordar la posible reforma de la ley de extranjería, que pretende imponer el reparto de menores migrantes de forma obligatoria entre migrantes. Clavijo ha insistido en que también abordarán el cumplimiento de la denominada como "agenda canaria" o los presupuestos generales del estado para 2025.

Ha aludido asimismo al gasto sanitario derivado de la gestión migratoria, que ha cifrado en unos 30 millones de euros, una "carga financiera que Canarias no puede soportar en solitario", pues es un problema "compartido" con España y Europa.

Más cooperación

En este sentido, y preguntado por el viaje de Sánchez programado para finales de agosto a varios países del África occidental, ha insistido en la necesidad de desarrollar políticas de cooperación y desarrollo en esos países para dar una oportunidad de vida a su ciudadanía y que no se vean forzados a subirse a un cayuco y jugarse la vida.

Además, Clavijo ha recordado que lo que ocurre en Canarias también pasa en Ceuta y está empezando a ocurrir "en Alicante", "algo que iba a ocurrir y que llevamos tiempo diciendo, por eso debemos dar una respuesta como país", ha dicho.

Propuesta del PP

Preguntado por la iniciativa legislativa que presentó ayer el PP en el Congreso sobre inmigración, con referencias al control de fronteras y sin mencionar la acogida solidaria entre territorios, el presidente canario ha señalado que no la ha podido leer en todos sus términos, si bien ha abogado por que exista un consenso y una respuesta unánime en este tema.

"Si al final lo que queremos es ir cada uno por nuestro lado, pues no tendremos una respuesta homogénea. Ayer saltó a los medios, hoy tengo previsto una reunión para poder analizarla en profundidad. Puede ser una oportunidad para conseguir ponernos todos de acuerdo o puede ser un elemento más de tratar esto como un problema político, pese a que es un problema humanitario al que tenemos que responder como sociedad", ha concluido