A pesar de lo esperado, el verano ha dado un respiro al sector agrícola, sobre todo en la zona norte de Tenerife. No obstante, los problemas del agua en cuanto a cantidad y calidad han aumentado en muchas zonas generando incertidumbre.
En este sentido, la papa, la viña y el plátano son los tres cultivos más afectados durante el verano. El plátano centra actualmente todas las miradas debido a la polémica pica, mientras que se espera una vendimia relativamente mala. “Con estas últimas lluvias que hemos tenido se complica todavía más la cosecha de este año, para la cual se estimaban daños de entre el 50 y el 60 por ciento, especialmente en el norte de Tenerife”, explica a Atlántico Hoy el secretario general de Asaga Canarias, Theo Hernando.
A ello se suma que aún hay papas almacenadas. “Los importadores trajeron mucha papa de Egipto, y eso hizo que la papa local se viera desplazada al inicio de la campaña entre mayo y junio. Algunas de ellas siguen almacenadas, aunque esperamos que duren poco tiempo más, pero la papa local se ha tenido que sacar poco a poco al mercado por esa competencia de la de fuera”, detalla.
Medianías
En cuanto a las zonas de medianías y con restricciones de agua, Hernando explica que se continua con la incertidumbre por su cantidad y calidad. “Por ejemplo, en la zona nordeste comentan que la cantidad de agua ha tenido una ligera mejora, pero que la calidad del agua que está llegando a Santa Cruz es bastante mala”.
La situación es similar en Vilaflor, donde el sector transmite que la calidad “es malísima”, apunta Hernando. “Muchos deciden no sembrar la papa para finales de año por el miedo a no tener agua o que la calidad no sea buena”. Con ello se ve que, aunque el verano ha acompañado, la situación sigue siendo compleja con el agua.
Balsas de Balten
Desde Balten, entidad Pública del Cabildo de Tenerife encargada del suministro de agua de riego de la isla, han informado en base al agua de riego de sus balsas a 1 de septiembre que, aunque el verano sigue siendo complicado, los datos son algo mejores que el año pasado.
De esta manera el volumen almacenado actual es de 871.436 m³, lo que supone un 18%, mientras que, en el mismo periodo, pero de 2023, era de 488.181 m³, el 12,2%.