La consejera de Sanidad del Gobierno de Canarias, Esther Monzón, ha reconocido este jueves en el Parlamento de Canarias que el Hospital Universitario de Canarias (HUC) estructuralmente “está anticuado” y se queda corto.
Lo hacía en respuesta a la diputada del Partido Popular, Rebeca Paniagua, quien mencionó la “preocupación” que había entre los usuarios debido a los problemas de espacio y de la falta de profesionales en el complejo hospitalario “heredados de la legislatura pasada”.
En este sentido insistió en que las urgencias del HUC "estaban en los titulares de la prensa un día si y un día también” y que aunque se están llevando a cabo mejoras en otros complejos como el HUNSC “el HUC no puede quedar atrás porque se ha quedado pequeño y los profesionales no dan más de sí” ante la “falta latente de médicos y camas sociosanitarias ocupadas con alta médica”, señaló. A su vez Paniagua subrayó la necesidad de mejora en los CAE como el San Benito o del Hospital del Norte, dependientes ambos del HUC, para evitar los desplazamientos por patologías que podrían tratarse allí de haber medios adecuados.
“Pido disculpas a pacientes y profesionales”
Monzón comenzó su intervención pidiendo “disculpas a pacientes y profesionales debido a la incomodidad que genera la situación” reflexionando que la solución “no puede darse a corto plazo” y reconociendo que “estructuralmente el hospital es viejo y se queda corto”.
Explicó que otros factores que repercuten en las urgencias son el aumento de la cronicidad, la longevidad –Canarias es una de las comunidades con más personas mayores— y la alta dependencia. “Estamos trabajando en esa estrategia sociosanitaria para poder atenderlos en domicilios”, dijo.
En relación a ello destacó que pondrán en marcha un plan de acción, que ya está “muy avanzado”, para los 10.200 pacientes crónicos.
“La asistencia está garantizada”
Ante los tiempos de espera en urgencias dijo que la asistencia de manera urgente “está garantizada”. Afirmó conocer que las largas esperas “no son cómodas” pero aseguró que esa asistencia urgente “se da” porque “cuando un paciente está grave obviamente se prioriza con respecto a otros”.
En cuanto a las acciones realizadas enumeró la contratación de todo el personal facultativo disponible para urgencias y del resto de especialidad que lo necesiten. Asimismo aseveró que se han hecho 856 contratos para reforzar el servicio del HUC y 126 para las urgencias del complejo hospitalario del norte.
Dio importancia a obras de mejora como las realizadas en la sala de observación de psiquiatría –con 130 metros cuadrados y capacidad para ocho pacientes–, así como un plan para hacer obras en el servicio de urgencias, concretamente en la sala de espera de familiares, en salas de observación, así como un nuevo espacio donde ahora está la hospitalización a domicilio o la adquisición de equipamiento como es el caso de camillas.