El incendio forestal devastador que sigue quemando hectáreas en Tenerife sigue su curso y ha llegado a amenazar infraestructuras del Observatorio Nacional del Teide que, por suerte, se ha logrado evitar.
Al respecto, la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, ha explicado a Atlántico Hoy esa situación “muy complicada” en que hubo que “defender” con bomberos, con la UME y con brigadas forestales “las infraestructuras del Observatorio, tanto Astrofísico como Meteorológico que, por supuesto, están en el Parque Nacional del Teide”. De hecho, aclara Dávila, “el personal del parque está trabajando en el propio incendio”.
Zona catastrófica
Respecto a la futura declaración de ‘zona catastrófica’ avanzada por el presidente del Gobierno de España en funciones, Pedro Sánchez, este lunes en el Punto de Mando Avanzado en Arafo, donde asistió también la presidenta insular, Dávila ha expresado que “ahora mismo es una catástrofe ambiental de una magnitud que todavía no podemos valorar”.
En este sentido, aunque señala que “el pino canario es resistente”, el fuego ha impactado en una parte muy importante de la corona forestal. “No estamos ahora para hacer evaluaciones. Estamos todavía para mirando el incendio con labores extensión, pero es fundamental de cara a poder tener recursos para poder repoblar, reforestar y analizar cómo vamos a trabajar de cara a la protección de las personas, porque lo hemos pasado muy mal en una zona de interfaz donde se mezcla el monte con poblaciones dispersas, pero cada vez más abundante”, apuntó la presidenta.
Unidad política
Asimismo, puso en valor la unidad política frente a esta catástrofe natural en Tenerife que se hizo palpable en la comparecencia de Sánchez (PSOE), junto al presidente de Canarias, Fernando Clavijo (CC), el vicepresidente Manuel Domínguez (PP), la propia presidenta insular (CC), el vicepresidente, Lope Afonso (PP), además del ministro de Turismo, Héctor Gómez (PSOE) y el subdelegado de Gobierno, Anselmo Pestana (PSOE). Todos ellos rodeados de los 12 regidores municipales afectados por el incendio.
“En este momento, hay aquí alcaldes y alcaldesas que velan por su población. No hay colores políticos. Yo he estado en contacto constante con la oposición en el Cabildo de Tenerife y me han mostrado, no solo a mí, sino también a los alcaldes, la disposición absoluta. En este momento no puede haber colores políticos. Todo lo contrario, ha sido un pueblo unido como no podía ser de otra manera”, argumentó Rosa Dávila.
Sin bajar la guardia
Por último, en el contexto de las primeras informaciones con tintes positivos, Dávila expresó que siguen trabajando, “pero no se puede bajar la guardia”, porque llevan seis días “con muchísimo trabajo intenso y todavía vemos la intensidad del fuego en un perímetro de 90 kilómetros”.
No en vano, reconoció que la parte más importante, además de que les preocupan los montes, es que no impactara sobre las viviendas. “Que tuviéramos una seguridad para las personas era fundamental para nosotros”, sentenció.