"Hasta aquí se ha llegado". Domingo Cejas, consejero de Aguas del Cabildo de Lanzarote ha asegurado a Atlántico Hoy que la red de abastecimiento de agua de la Isla necesita una intervención urgente puesto que las instalaciones ya presentan claros signos de agotamiento.
En plena ola de calor los majoreros se han quedado sin agua mientras los termómetros han llegado a los 45 grados y el Cabildo se ha puesto manos a la obra para frenar una situación que viene de lejos pero que está explotando ahora. "La red hidráulica tiene prácticamente 40 años de existencia, pero no se le ha hecho ninguna intervención. No se puede dejar tantos años sin intervenir las instalaciones aunque sea una concesión", ha asegurado a Atlántico Hoy Domingo Cejas. "Canal Gestión —empresa a la que el Consorcio del Agua de Lanzarote tiene cedida la concesión del servicio— cumple con sus objetivos y si no los cumpliera nosotros estaríamos detrás de ellos para que cumplan, pero eso no significa que el Consorcio no tenga que invertir en infraestructura, ni que no tenga que ir mejorando la red y las propias plantas desalinizadoras. Hemos perdido muchísimos años de no planificación y de no inversión", critica Cejas.
La red hace tope
La ola de calor no ayuda a la grave situación que se vive en Lanzarote. "Entre julio y agosto hemos incrementado el consumo del agua casi un 10% con respecto a 2022. Es una situación complicada y crítica porque las infraestructuras están como están. Estamos intentando ir solventando día a día y a ver cómo podemos mejorar la situación y pidiendo comprensión a toda la ciudadanía", explica Domingo Cejas.
"Como nuevo consejero no me gusta mirar para atrás, pero tampoco perder el pasado de vista. Mi responsabilidad y obligación es buscar solución a este problema gravísimo y se irá pidiendo responsabilidades a ver qué es lo que ha pasado en estos últimos años que no se ha invertido ni un euro en mejorar la infraestructura". El consejero asegura que dirán "qué es lo que ha pasado de aquí para atrás, porque no se ha hecho prácticamente nada, es más, incluso es triste que dinero que teníamos por convenio desde el Ministerio, o convenios del Gobierno de Canarias de millones de euros lo hayamos tenido que devolver. Eso no tiene ninguna justificación en cuanto a la responsabilidad política. Acabamos de devolver el 25 de julio del mes pasado 1,6 millones de euros que iban destinados a hacer obras y reparaciones en 55 calles, pero no las ejecutaron y el Gobierno ha dicho que hay que devolverlo y hay que hacerlo con intereses", asegura el consejero de Aguas de Lanzarote.
Manos a la obra
Domingo Cejas explica que ahora el camino es trabajar de manera conjunta con los alcaldes de los municipios afectados. "Hemos tenido una reunión informativa con todos los alcaldes para hacer una asamblea la próxima semana donde aprobemos de manera urgente actuaciones de calle en toda la Isla para empezar a renovar red nueva con la idea de bajar la pérdida y esa es nuestra obligación y objetivo". Los problemas se pueden reducir en la existencia de un 56,42% de pérdidas en la red de abastecimiento de agua potable; la capacidad de producción de la Central de Desalinización Díaz Rijo se ha reducido en 10.000 metros cúbicos al día debido a la parada de un bastidor; la tubería de suministro de agua de Lanzarote a La Graciosa sufrió, a lo largo de 2022, más de seis roturas que han dejado sin abastecimiento a la población por periodos medios de 72 horas; o la necesidad de incrementar la capacidad de producción para garantizar la demanda actual que se ha incrementado en un 6%.
El presidente del Cabildo, Oswaldo Betancort, invitó a los miembros del Consorcio a “participar activa y constructivamente en sumar esfuerzos para restituir un servicio digno y mejorar una red de agua que no ha recibido ni la atención ni la inversión que requiere y merece una isla como Lanzarote y como La Graciosa”. “Todos formamos parte de esta entidad pública y debemos ir de la mano para llevar a cabo un Plan Hidrológico ambicioso pero con la participación y sincronía del Cabildo y los siete Ayuntamientos de la Isla, para mejorar la producción, distribución y depuración de aguas para no volver a sufrir falta de suministro que están afectando gravemente a la población”, expresó Betancort.
Ayuda externa
“La primera medida que se aplicará con el objetivo de aumentar la capacidad de producción es instalar dos nuevas desaladoras cedidas de forma gratuita y que llegarán en unos días desde La Palma”, explicó por su parte el consejero de Aguas, Domingo Cejas, recordando que desde 2021 se han producido averías y roturas en los bastidores que abastecen de agua a Lanzarote y a La Graciosa, “pero en los últimos años esta emergencia no ha sido atendida y ahora está la ciudadanía pagando las consecuencias”, lamentó.
“No podemos perder ni un minuto más en materializar las inversiones y actuaciones posibles por trabas administrativas que se puede solventar con una coordinación más fluida entre la máxima institución insular y las entidades locales”, añadió Cejas.
Proyectos sin licitar
De un total de 57 proyectos, tan sólo tres se encuentran en ejecución: el “Proyecto de Instalación de la tubería de transporte Zonzamas–Arrieta. Línea Norte 1”; el “Proyecto de mejora de la red de abastecimiento de agua potable a San Bartolomé”; y la “EDAR de Arrecife”, incluida dentro del Convenio con Acuaes suscrito en fecha 21 de julio de 2021.
“Los 54 restantes, la mayoría tendrán que ser actualizados dado que, algunos fueron redactados hace varios años sin que hayan sido ni licitados ni adjudicados, por lo que ahora requieren ser revisados para proceder a una actualización de precios, o incluso adaptarlos a normativa, y otros están pendientes de autorización”, explicó Oswaldo Betancort.
“De no contar con la colaboración de los ayuntamientos implicados, nos veremos abocados a devolver con intereses los importes objeto de los convenios, unos cinco millones de euros”, concluyó Betancort, reiterando “la importancia de estar unidos ante la delicada situación, dejar de lado los intereses partidistas y priorizar el interés general”.
El reto de Canarias
"Canarias ha sido la pionera en Europa en desalación de agua. En el año 1964 se instaló la primera desaladora en las Islas. La desalación forma parte de nuestro ADN porque hay un déficit de recursos hídricos y nos hemos visto obligados a buscar fuentes no convencionales de agua", indican fuentes del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC).
"Hasta un 25% de la electricidad que se produce en la isla de Lanzarote va a las desalinizadoras. Si tienes pérdida de agua en las redes es una doble pérdida: no solo pierdes el agua, sino también la energía que has gastado en producir esa agua", explican técnicos del ITC. Por eso, aseguran, el reto en el que trabajan actualmente es en reducir ese coste enrgético. "Tenemos que tender hacia la autosuficiencia energética y que nuestras desaladoras sean capaces de alimentarse con fuentes de energía endógenas, fuentes de energía renovables".
Replicar lo bueno
Un ejemplo a replicar, según el propio ITC es Singapur. "En Singapur hay sitios donde el agua residual —aquella que se genera de las heces o del pis— se convierte en agua de beber. Eso es la regeneración del agua, pero el principal reto en el que trabajamos nosotros ahora es reducir el consumo energético de las desalinizadoras".
"Una de nuestras líneas de trabajo es esa y buscar nuevas tecnologías que no han entrado en el mercado y que estamos probando, que entrarán en el mercado dentro de cinco años o más, que reducen más los costes de la ósmosis inversa, la tecnología de menos coste actualmente", explica el ITC a Atlántico Hoy. "En Canarias hay más de 330 desaladoras a falta de actualizar esos números. En el caso de Lanzarote hay más de 80 desaladoras y la mayoría son privadas. En Lanzarote y Fuerteventura prácticamente el 100% del agua es desalada", asegura, lo que supone que cuando la red falla, la población está atada de pies y manos.