Loading...

Sociedad

Quesos Tajogaite: aguantar mejor el volcán que la guerra en Ucrania

2 minutos

88f3a7889bbee977740add5c13b8e0a7037c7aa5w

El sector ganadero y la industria quesera de La Palma aguantó, no sin dificultades, la erupción de un volcán que se llevó por delante cuatro granjas y obligó la evacuación de más de 1.500 cabezas de ganado caprino, pero es la subida de los precios del cereal, a causa de la guerra, lo que amenaza el futuro de las explotaciones.

A Julio César Leal, dueño de quesos Tajogaite, le apareció el 19 de septiembre de 2021 una erupción fisural a 600 metros de su granja y quesería, lo que le obligó a abandonar sus más de 100.000 metros cuadrados de terrenos de pasto y su maquinaria de producción, para empezar de nuevo en la central quesera insular, cedida por el Cabildo de La Palma.

Antes de ser nombre de volcán, Tajogaite era una de las marcas de quesos más conocidas de La Palma, ubicada en la zona que se conocía como El Frontón y ahora ocupa el nuevo cono volcánico. "Todavía estoy pagando el préstamo de ese terreno", cuenta a Efe Julio César, "aunque esté bajo la lava, el banco no perdona nada".

Pese a perder sus tierras de pasto y más de 150.000 euros en maquinaria para la elaboración de quesos y yogures, gracias al esfuerzo y al trabajo conjunto con los ganaderos que le proporcionan la leche, Quesos Tajogaite pudo volver a producir en menos de una semana desde la erupción del volcán.

Esta quesería compra la leche a 14 ganaderos actualmente, cuatro menos que antes de la erupción, pero la pérdida de proveedores no ha sido a causa del volcán, sino de una crisis global ante la que el sector primario de una isla menor se encuentra indefenso. Pagan la subida del precio del forraje a raíz de la guerra en Ucrania.

"Si antes te costaba un saco de millo cuatro euros, ahora te cuesta once", explica con claridad Julio César. "El queso no lo puedes subir tanto, pero lo que ha subido, lo tengo que reinvertir en comida".

En seis meses se ha triplicado el coste de la alimentación del ganado, por lo que este empresario y quesero no cesa en la búsqueda de soluciones: comprar grano directamente, sin intermediarios, o elevar el precio del producto para pagar más a sus ganaderos.

Y es que las consecuencias más directas de la subida de los precios del forraje impactan sobre los ganaderos, que se ven obligados a vender sus cabras, incluso para producción de carne, para detener la sangría de pérdidas que conlleva mantener a las cabezas de ganado cuando la venta de leche no da beneficios.

Ante la imposibilidad de seguir cubriendo los costes de la alimentación, algunos ganaderos han tenido que tomar decisiones muy drásticas. "Llevar las cabras al matadero es algo muy duro", apunta Julio César.

Por ello, tanto él como el resto de ganaderos de la isla llevan esperando por la línea de ayudas extraordinaria anunciada durante el mes de marzo por el Cabildo de la Palma con presupuesto de 500.000 euros para el pago del forraje, una subvención que, aunque será útil, cubrirá una cuarta parte del coste mensual de la alimentación del ganado.

"Y lo peor es que aún no hemos recibido ni un euro en las cuentas" comenta Julio César.

A pesar de las adversidades, el queso fresco de La Palma sigue siendo un producto muy demandado, y muestra de ello es que, día tras día, Quesos Tajogaite vende la producción de quesos en su totalidad, por lo que Julio César comenta: "este año no he podido guardar ni para semicurado, se ha vendido todo fresco".

Etiquetas: