Lo que para una persona puede ser bonito para otra puede ser feo, porque sobre gustos,como se suele decir, no hay nada escrito —o sí—.
Hay parámetros que pueden poner luz sobre determinados asuntos, no hablamos de la tortilla con o sin cebolla, un tema de conversación capaz de generar una hecatombe y del que es mejor abstenerse en las batallas familiares, hablamos de pueblos. Canarias está repleta de sitios encantadores y rincones únicos, pero la verdad, es que no todos los pueblos son agraciados. Los hay con playas idílicas, con senderos espectaculares o incluso aquellos que combinan un poco de todo: cascada, mar y montaña a la vez y luego hay otros que no tienen ni una cosa ni la otra y por no tener, no tienen ni el aprobado de una conocida lista de viajes. ¿Cuál crees que es?
El pueblo más feo de Canarias
Sería injusto no tener en cuenta las dos provincias de Canarias, por eso, la revista Viajar ha publicado 'El mapa de España con el pueblo más feo de cada provincia'. Para ello, ha tenido en cuenta la opinión fundamentada de la Inteligencia Artificial, que ha establecido en base a varios parámetros qué dos pueblos canarios incluye en su desafortunado ránking.
En la provincia de Las Palmas, el ganador —o mejor dicho perdedor— es Vecindario. Según ChatGPT, las razones que lo han empujado a incluir este nombre en la lista es por siete motivos:
- Falta de atractivos turísticos
- Desarrollo urbano desordenado
- Escasez de espacios verdes
- Zona comercial predominante
- Falta de patrimonio histórico
- Proximidad a las áreas industriales
- Descuido en el mantenimiento
En el caso de la provincia de Santa Cruz de Tenerife, el elegido es Guargacho. Aquí la inteligencia artificial ha aludido a su "falta de identidad cultural" algo que lo convierte en menos atractivo para el público y también más feo, a pesar de que en el Barranco de Guargacho hay un importante yacimiento arqueológico aborigen de tipo ritual y de culto, dado a conocer en 1972 por Diego Cuscoy como "uno de los grandes hitos de la arqueología de Tenerife".
En su respuesta en el artículo de la revista Viajes, la IA ha querido recalcar que las valoraciones son "subjetivas y discutibles, ya que incluso los lugares menos agraciados pueden tener su propio encanto para quienes buscan otro tipo de experiencias", sentencia" y además, lo que es feo para algunos puede ser muy bonito para otros.