Calles empedradas y casas de arquitectura tradicional, con sus diversos colores, dan la bienvenida al visitante de este pueblo que, por su encanto rural e impresionante paisaje, es conocido como 'el bombón de La Gomera'. En el norte de la isla y a poco más de media hora en coche de la capital aparece este pueblo que podemos visitar callejeando pero también apreciar desde su famoso mirador, suspendido a más de 600 metros de alto, con vistas también a la vecina Tenerife.
Aunque su población ha disminuido y actualmente cuenta con poco más de mil habitantes, su casco antiguo es uno de los mejores conservados de todo el archipiélago y es una de las localidades con más historia de La Gomera desde que fue fundada en 1607 por colonos procedentes de Tenerife. En el siglo XVIII se constituyó el ayuntamiento pero fue a principios del XX cuando la población creció de la mano del auge del cultivo del plátano, aunque desde 1960 volvió a caer en picado.
Entre las paredes de basalto del valle y a los pies del océano Atlántico, Agulo es un rincón rural cuidado al detalle que nos traslada a épocas pasadas a través de sus calles y edificios por los que, sin embargo, no parece haber pasado el tiempo. Restauradas con mimo y esmero, las sencillas construcciones se alzan en calzadas de piedra hasta componer una postal idílica en el lecho del valle, con fachadas coloridas sobre un mar al fondo donde asoma El Teide.
Un paseo por Agulo
Pasear por Agulo sin rumbo es probablemente la mejor forma de conocer este pueblo, consultando las recomendaciones de los panales informativos repartidos por el casco urbano. Con todo, algunos monumentos son imprescindibles, como la hermosa iglesia de San Marcos con sus blancas cúpulas, en contraste con el resto de construcciones. El templo actual data de comienzos del siglo XX y se erigió en el mismo lugar que ocupaba la ermita primitiva de Agulo.
También es recomendable rendir homenaje a uno de los vecinos más ilustres de Agulo visitando su casa. En ella se recoge una pequeña colección de obras del pintor muralista José Aguiar que, aunque nació en Cuba, pasó toda su infancia entre la Isla Colombina y Tenerife, hasta que marchó a formarse a Madrid y posteriormente Florencia.
Pero con toda seguridad la atracción más impresionante de Agulo es el mirador de Abrante, una pasarela de cristal que pondrá a prueba nuestro vértigo, pues se encuentra suspendido a 625 metros de alto. Si la emoción te da hambre, después de contemplar las vistas puedes comer en el restaurante y seguir disfrutando del paisaje.
Los 20 pueblos de 'The Times'
En el listado elaborado por el periódico ingles también aparece otro pueblo canario, en este caso, en la isla de Lanzarote. La antigua capital de la isla, Teguise, figura en el puesto 17 entre los pueblos más bonitos de España según la publicación inglesa. Con seis de los 20 pueblos, Andalucía es la región que más poblaciones incluye en el listado, mientras que Asturias, con tres pueblos, es la segunda más representando.
Por detrás de Agulo, en segunda posición de se encuentra Alcudia (Mallorca) y, en tercera, Almonaster la Real (Huelva). A continuación Genalguacil (Málaga), Pampaneira (Granada), Lucainena de las Torres (Almería), El Castell de Guadalest (Alicante), Morella (Castellón), Tazones (Asturias) y Setenil de las Bodegas (Cádiz) copan los primeros diez puestos.
En undécimo lugar encontramos Mirambel (Teruel), seguido de Baguergue (Lleida), Bulnes (Asturias), Cudillero (Asturias), Valverde de la Vera (Caceres), Castillo de Castellar (Cádiz), Teguise (Lanzarote), Alcalá del Júcar (Albacete), Urueña (Valladolid) y, finalmente, en el puesto 20, Potes (Cantabria).