El incendio que sigue azotando la corona forestal de Tenerife y que se inició en los altos de Arafo y Candelaria está destruyendo gran parte de la masa forestal de pinos canarios característicos de la orografía insular.
Sin embargo, en una zona concreta del propio municipio de Arafo, el papel del pino no es el de afectado, sino el de agresor, y amenaza para la biodiversidad del barranco de Añavingo, donde habitan, entre muchas especies endémicas y únicas del lugar, hasta 27 especies de abejas diferentes.
Punteros en Europa en biodiversidad
“Tenemos los puntos de biodiversidad más punteros de Europa, que significa que es donde se concentra mayor biodiversidad de especies. Esta zona es el siete en nivel de biodiversidad. El primero es Anaga”, contextualiza a Atlántico Hoy Juan Curbelo, técnico medioambiental en el Ayuntamiento de Arafo, y experto en la materia.
En este sentido, Curbelo señala que en el entorno del barranco esta zona de pinar “se sembró en el año 1956” y que antes eran zonas antrópicas de cultivo, es decir, “que cultivaba el ser humano. Casi 70 años desde la entrada del pino canario en esta región forestal que en la vida paisajística significa que son “jovencísimos”.
Los cauces de los barrancos
“Hoy, la única zona donde la vida está anclada es en los cauces de los barrancos, que es donde está la potencia de biodiversidad. Donde existen montones de especies que solo están en esos cauces”, detalla Curbelo. Tal es así, que el técnico medioambiental apunta que los cauces de los barrancos tienen 35.000 años. “Dos mundos distintos”.
Por ello, relata Curbelo, “cuando se plantó el pinar, ese bosque termófilo de biodiversidad se quedó en el cauce de los barrancos. Con el paso de los años el pino ha ido creciendo hacia el barranco y ha ido creciendo, invadiendo el cauce y empezando a compartir espacio y quitar el bosque termófilo”.
Especies secas
El problema no está solo en esa conquista del espacio por parte del pino, sino por las propias características de las especies vegetales que facilitan el paso de las llamas, dentro de la situación actual.
Así, el pino es un arbol seca cuya cualidad se extiende a su entorno. Para entenderlo, Curbelo argumenta que el pino “quema lo que hay a su alrededor, porque lo seca”, mientras que otra especie tan característica canaria como la laurisilva, por su fuerte humedad, aguanta más un incendio, que sería el caso de Anaga y otros lugares de Canarias.
La regeneración del pino
En este contexto, la rápida regeneración del pino canario -dentro de los tiempos vitales de la naturaleza- termina por imponerse en el terreno a la biodiversidad anclada en los barrancos cuando terminan por quemarse.
“La invasión del pino ha provocado que el bosque termófilo se haya quemado o se vaya a quemar. En diez años el pino se regenera y el bosque termófilo no, por lo que especies únicas como el cabezón de Añavingo, se pierde. Si seguimos con la plantación de pinos donde coexista con los bosques naturales, ese bosque va a desaparecer si continúan los incendios en el futuro”, explica Juan Curbelo.
Reducción del espacio de la biodiversidad
Con todo, Curbelo se lamenta que la biodiversidad aun existente en el barranco de Añavingo “en vez de haber conseguido liberarla", lo que se hecho "es encarcelarla y están unos reductos malviviendo, que son las plantas y todos los animales asociados a ellas, como 27 especies de abejas únicas en el mundo”.
Más afecciones en el resto del incendio
Sin embargo, este problema de reforestación del pino canario en zonas de biodiversidad no solo afecta al barranco de Añavingo y alrededores. También lo hace en otros puntos donde el fuego actúa en estos días en la corona forestal, como lo confirma la bióloga botánica Atteneri Rivero a Atlántico Hoy. "Además de en Arafo, es cierto que en la parte norte que se está quemando y que es un pinar de población muy denso, se reforestó en zonas donde había y debería haber lauirisilva", declara.
En este sentido, Rivero aclara que en la actualidad hay partes que se llaman pinar mixto, porque hay brezos, fayas y pinar, pero se actúa al respecto "El cabildo lleva desde años haciendo aclareos para poder recuperar las zonas de laurisilva, pero se tiene que hacer poco a poco y lamentablemente es por la zona que se está quemando ahora mismo, por los altos de La Orotava y La Esperanza".
Pérdida de joyas de la corona
De esta manera, Rivero abunda en que "en realidad lo que estamos perdiendo no es solo las masas de pino canario, sino unas joyas naturales de endemismos canarios espectaculares, porque el pinar no solo es los pinos, sino los barrancos asociados a la altura o los bosque termófilos. Nos estamos perdiendo unas joyas de la corona increíble con este incendio y eso no va a rebrotar.
En esta línea, la bióloga botánica es finaliza de forma determinante con el futuro: "Si el fuego quemó el reservorio de semillas que hay en el suelo estamos ante una perdida muy importante de biodiversidad canaria".