Un perro ha muerto, aparentemente electrocutado, durante la mañana de este martes al pisar una tapa de la red de electricidad en la céntrica calle de San Vicente Ferrer en Santa Cruz de Tenerife.
Los hechos se daban a conocer a través de un vídeo publicado en la red social Facebook, donde se podía ver al perro tapado con una manta. Según ha comunicado el consistorio capitalino, el 092 recibió una llamada informando del desvanecimiento del animal al pasar por una tapa de la empresa Endesa ubicada en la acera. Al llegar al lugar y certificar el fallecimiento del perro comprobaron que desde la alcantarilla salía humo. No obstante, desde Endesa señalan que no tienen constancia "de que el animal haya muerto electrocutado" y que la autopsia será determinante para esclarecer lo ocurrido.
La Policía Local comunicó el caso al CETRA-Cecopal "para localizar a algún responsable de la empresa eléctrica, comunicar lo ocurrido y solicitar presencia de personal técnico en el lugar" y siguiendo el protocolo "se pasó a identificar a la propietaria del perro y a varios testigos de los hechos". Al llegar el personal de la empresa a la zona "comenzaron a gestionar la incidencia, por lo que se procedió a balizar", detalla el consistorio.
Piden explicaciones a Endesa
Desde el ayuntamiento aseguran que "se están tomando todas las medidas para aclarar el trágico suceso y garantizar la seguridad de los vecinos y vecinas, así como de sus mascotas". Por ello insisten en que pedirán formalmente explicaciones a la compañía eléctrica y han solicitado a la empresa, que es responsable del mantenimiento de las redes eléctricas de la ciudad, "una revisión urgente de la totalidad de estas instalaciones".
Tanto el alcalde de la ciudad, José Manuel Bermúdez, como el concejal de Bienestar Animal, Carlos Tarife, y la concejal del distrito, Purificación Dávila, han exigido a Endesa "una explicación inmediata" por lo sucedido.
Posible derivación por la lluvia
Según ha podido saber Atlántico Hoy a través de fuentes de la compañía, desde Endesa están investigando los hechos. "Es cierto que existe la posibilidad de que se produjera una derivación propiciada por la lluvia y por el efecto de los roedores que, en ocasiones, roen parte del material del aislamiento, pero la muerte del animal también puede deberse a otras causas aún no descartadas", detallan en un comunicado.
Afirman que nada más tener conocimiento de los hechos "trasladaron un equipo técnico para reforzar el sistema de aislamiento de las arquetas de la zona y revisar todos los detalles eléctricos". Apuntan que los tubos eléctricos de las arquetas "son sellados para evitar en la medida de lo posible el acceso de los roedores".
La compañía además ha querido transmitir "un mensaje de tranquilidad a la población y dejar claro que este tipo de situaciones no se dan en las personas porque van protegidas por el calzado", que se trata así de un caso "excepcional y el único que conocemos en 40 años" por lo que "debemos ser cautos y tener todos los datos técnicos antes de emitir una causa-efecto" y han lamentado el fallecimiento del animal.