Canarias está llena de sorpresas incluso para los canarios. No hay rincones feos en las ocho maravillas del Atlántico y entre playas, senderos y pueblos destacan lugares que parecen haber salido de una película.
Uno de estos lugares se encuentra en uno de los puntos más altos de Gran Canaria, donde se erige el mítico Parador de Cruz de Tejeda, en uno de los pueblos más bonitos de España.
Un parador renovado
El Parador de Cruz de Tejeda surgió de las cenizas como lo haría un ave Fénix. En septiembre de 2017 un incendio en la Isla dejó calcinadas varias zonas del emblemático hotel como sus habitaciones y zonas del spa.
Un año después, en 2018 volvió a abrir sus puertas completamente renovado y dispuesto a atender de nuevo a su clientela que se movía no solo por las instalaciones sino por las vistas únicas que apuntan hacia el roque nublo.
Nadar por encima de las nubes
Nadar encima de las nubes es posible en el Parador de Cruz de Tejeda. Se encuentra a 1.560 metros de altitud con unas vistas panorámicas completamente privilegiadas hacia Risco Caído y desde las que se puede nadar en la piscina climatizada observando el mar de nubes debajo del hotel.
La piscina forma parte de un circuito de spa que comienza en una zona interior con hidromasaje, burbujas y chorros y que finaliza el recorrido en la piscina exterior a la que se puede acceder independientemente de la época del año, pues el agua está perfectamente aclimatada.
Desayunar en la naturaleza y dormir entre árboles
Las habitaciones del parador dejan volar la imaginación con sus grandes ventanales y cristaleras que se mimetizan con el frondoso bosque del exterior. Además, la habitación estándar y la superior tienen una terraza en la que podrás desayunar en plena naturaleza.
El parador tiene muchos servicios: acepta mascotas, tiene aire acondicionado, desayuno en la habitación, gimnasio, jardín, televisión, sala de tratamientos estéticos y masajes, lavandería, spa y wifi gratis.
Comer entre las nubes
El parador tiene un restaurante que también tiene vistas únicas y platos típicos como escaldón de gofio, potaje de berros o papas arrugadas, queso de Tejeda, baifo, pulpo, cherne y medregal a la plancha y el famoso postre bienmesabe.
El pueblo más bonito de España
El parador está situado en uno de los pueblos más bonitos de España, en Tejeda a 1.050 metros de altitud desde el que se pueden hacer numerosas actividades.
Los visitantes pueden ir al Museo de Esculturas Abraham Cárdenes, un famoso escultor canario, tambien está el Museo Etnográfico y el conocido Centro de Plantas Medicinales, todas ellas paradas obligatorias.
Además, no se puede dejar de probar los dulces típicos del pueblo, conocidos en toda la Isla por su sabor y por el que cada día se desplazan a esta localidad decenas de turistas y locales que aprecian el inconfundible sabor y aroma de las almendras tostadas.
Comer en un área recreativa
Otra de las actividades a llevar a cabo en esta bonita zona rural es ir de picnic a sus áreas recreativas. En los Llanos de la Pez hay zona de barbacoa, aseos y agua, lo indispensable para para un día agradable con familia y amigos.
La Presa de las Niñas también es otra zona de gran fama, cuenta con los mismos servicios y se compone de una gran balsa de agua rodeada de vegetación y senderos maravillosos.