Juan Luis Wood vive en Barcelona desde hace 30 años. Tiene su vida hecha en la ciudad condal, pero sus raíces son canarias. Empezó a dedicarse a la vela con ocho años y desde entonces no se ha desprendido de su pasión. Un amor por el deporte que lo ha hecho llegar muy lejos, hasta el punto de competir en los Juegos Olímpicos de Sídney (2000). Tras una larga trayectoria, su bagaje le ha permitido acabar como director comercial para España de un equipo estadounidense en la competición de regatistas más importante del planeta: la Copa América.
“Es el evento deportivo más antiguo del mundo”, exclama en una entrevista concedida a Atlántico Hoy. “Estamos hablando de que su origen está en el año 1857”, apunta. Quien ahora trabaja para el New York Yacht Club es uno de los promotores de que un torneo tan importante se vaya a celebrar en Barcelona entre los meses de octubre y noviembre de 2024.
En qué consiste el torneo
El equipo norteamericano al que pertenece ganó el pasado domingo la regata preliminar de cara a la 37ª edición que tendrá lugar dentro de un año. Es un evento previo de lo que, como manda los cánones, es en realidad la Copa América.
La competición consiste, para los más puristas, en que el equipo que ganó la última vez –en la actualidad, el Real Escuadrón de Yates de Nueva Zelanda– se enfrente al que haya conseguido batir al resto después de lo que en términos futbolístico se llamaría una ‘liguilla’. Esto se desarrollará entre agosto y septiembre del próximo año.
"Un sueño casi imposible"
Wood jamás creyó que alguna vez iba a formar parte de la Copa América. “Cuando eres regatista y lees cosas del evento piensas que es un sueño casi imposible”, afirma. Narra que para muchas personas que compiten en la vela formar parte de la competición más vista en el mundo después de los Juegos Olímpicos y el Mundial de Fútbol implica culminar una carrera deportiva.
“Tengo muchos recuerdos de cuando estaba en el Club Náutico de Las Palmas de Gran Canaria, estaba con compañeros y alucinábamos cuando nos encontrábamos una revista con una foto de la Copa América y la analizábamos con todo lujo de detalles. Era para nosotros el santo grial”, cuenta con añoranza.
Aportar su experiencia
Sobre que se celebre en España, detalla que es porque los neozelandeses estaban en la búsqueda de un lugar para desarrollarla. “Como llevo residiendo en Barcelona desde hace más de 30 años tuve la oportunidad de ser uno de los promotores, de ser uno de los que inició el proyecto de presentar la candidatura de la ciudad con el objetivo de albergarla aquí”, subraya el olímpico.
“Y al tener tan buena relación con uno de los equipos, el club americano me llamó y me preguntó si podía formar parte de ellos, lo que para mí fue una sorpresa maravillosa. Al final necesitaban a una persona que tuviese bagaje en el mundo de la navegación y que viviera desde hace tiempo en el lugar. Además de conocer gente y a las entidades”, indica.
¿Copa América en Canarias?
No es la primera vez que España acoge la Copa América. En 2007 la sede fue Valencia porque el ganador vigente era Suiza y se requiere mar abierto. Wood prefiere no pronunciarse sobre si alguna vez la competición podría celebrarse en Canarias. “Es verdad que lo veo lejano, pero no lo considero en absoluto una utopía”, esgrime.
Por lo pronto, donde los participantes competirán para hacerse con la victoria es en Barcelona. “A efectos económicos poder albergar una competición así es un beneficio absoluto para la ciudad y el país. Pero más allá de esto, sí que en el ámbito deportivo es una lástima que no podamos contar con un equipo español de Copa América”, lamenta Wood.
Compañerismo, honor y tradición
“Los presupuestos”, admite, “son altísimos”. Además, “el tiempo ha sido demasiado justo como para desarrollar un proyecto bien armado·. Confía en que para próximas ediciones “en este país nos podamos sentar todos para aunar esfuerzos y tener un equipo de copa américa porque España por su tradición náutica merece tener un equipo”.
El canario empezó a navegar en Puerto Rico, al sur de Gran Canaria; y luego pasó al Real Club Náutico, en la capital de la Isla. “Es un deporte que marca mucho y que cuando haces amistades son amigos para toda la vida”, resalta. “Y eso está basado en los valores de este deporte: compañerismo, honor y tradición. A día de hoy se siguen manteniendo”, culmina.