Llegan las altas temperaturas a Canarias y el interior de una casa mal ventilada se puede convertir en un horno en cuestión de horas. Muchas personas no pueden instalar un aparato de aire acondicionado en sus hogares o no pueden hacerse cargo del coste energético que se refleja en la factura de la luz.
Para quién prefiera ahorrar dinero en verano y apostar por opciones más sostenibles hay métodos caseros que te ayudarán a lidiar con el calor. Según Kronos Homes, solo la mitad de españoles tiene aire acondicionado y en dos de cada diez hogares no pueden permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada utilizándolo.
Ventilación natural
Aprovechar la propia ventilación natural puede ser fundamental para enfriar los hogares. Lo ideal es abrir las ventanas durante la noche para facilitar la circulación de aire fresco, al contrario de lo que ocurre durnate el día, cuando es mejor cerrar ventanas, persianas o cortinas.
La ventilación cruzada, que implica abrir ventanas en extremos opuestos de la vivienda, facilita la salida de aire caliente hacie el exterior. Este proceso puede ser aún más efectivo si se colocan ventiladores estratégicamente para ayudar a mover el aire caliente.
Rayos solares
Las cortinas, persianas y toldos son los mejores aliados para bloquear la luz solar directa y evitar que los rayos solares penetren en el interior de la vivienda. Es mejor que todos estos elementos tengan colores claros que reflecten la luz y no absorvan el calor.
En caso de tener jardín, también puede ser muy efectivo plantar árboles o instalar pérgolas con enredaderas que proporcionen sombra y reduzcan el calor que puede llegar a absorber la vivienda del exterior.
Sellado
Para evitar que el calor penetre en la vivienda hay que aislar paredes, suelos y techos, sobre todo si se vive en un ático.
Conviene sellar las rendijas y los huecos de puertas y ventanas para evitar la entrada de aire caliente. Un buen aislamiento puede comenzar con la elección de vidrios tintados que absorben una parte de la radiación solar.
Uso de electrodomésticos
Los electrodomésticos pueden generar una cantidad considerable de calor. Apagarlos cuando no están en uso ayudará a mantener la casa más fresca y evitar usarlos, en la medida de lo posible, durante las horas más calurosas del día.
De igual manera, las bombillas tradicionales contribuyen a elevar la temperatura de las estancias, pero si se cambian por bombillas LED o de bajo consumo no solo se rebajará la emisión de calor, sino que también se consumirá menos energía.