La Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha celebrado este lunes un juicio en el que una mujer acusa a su compañero de piso de haberla violado, tras entrar sin su permiso en su habitación tal y como había lo había intentado en alguna ocasión anterior.
La Fiscalía solicita ocho años de prisión, una orden de alejamiento de 500 metros durante doce años, el pago de 10.000 euros, obligación de participar en un curso de educación sexual durante cinco años y la prohibición a lo largo de 10 de trabajar con menores.
El hombre negó los hechos y aseguró que mantenían relaciones con frecuencia, que la noche del 23 de junio de 2023 la encontró en la zona común de la casa que compartían en Santa Cruz de Tenerife y fue ella quien lo invitó a entrar a su cuarto.
Orden de alejamiento
Admitió que aquella noche había bebido “pero no mucho” y supone que ella también lo había hecho, desconocía el origen de las lesiones que presentaba en las muñecas y pecho pero indicó que hacía poco tiempo ella había estado en su cuarto con dos chicos. Cuando llegó la policía él estaba totalmente dormido, no sabía lo qué ocurría y en ese momento fue detenido y se le impuso la prohibición de acercarse a menos de 300 metros a ella.
La policía que atendió a la mujer dijo que ésta sólo quería hablar con una agente femenina y calificó de “shock total” su estado hasta el punto de que era incapaz de articular palabra alguna y no le dio la impresión de que hubiese bebido. La continuación del juicio será la próxima semana ya que no se pudo contactar con la dueña de la casa para que compareciera como testigo.