La clásica frase de “somos lo que comemos” del filósofo y antropólogo alemán, Ludwig Feuerbach, es una gran verdad, pues la calidad de los alimentos que ingerimos, condiciona nuestra salud en su conjunto, nuestro niveles de energía y hasta nuestro estado de ánimo. Los científicos afirman que cada uno de los alimentos que ingerimos generan una respuesta química en nuestro organismo, la cual puede favorecer la aparición de una emoción u otra. La nutricionista Graciela Moreira de PronoKal Group asegura que el estado de ánimo y la conducta dependen de la "energía y nutrientes que recibimos". Asimismo, es conveniente tener en consideración el hecho de que, en función del estado de ánimo que tengamos en un momento dado, vamos a tener cierta predilección por ciertos alimentos que estén en consonancia con nuestras emociones y que nos ayuden, en muchas ocasiones, a calmarlas. Los alimentos más elegidos en situaciones en las que queremos calmar nuestras emociones, suelen ser alimentos ricos en azúcares, grasas saturadas y harinas refinadas, tales como bollería industrial, pizza, dulces, galletas, etc. Por consiguiente, el llevar un dieta variada y equilibrada, que contenga todos los nutrientes necesarios para nuestro organismo, resulta clave a la hora de tomar las mejores decisiones alimenticias y a la hora de gozar un estado de ánimo caracterizado por la estabilidad. Con el fin de alcanzar el mencionado objetivo, en el presente artículo se ofrecen una lista de alimentos que influyen de manera positiva en nuestras emociones y, por tanto, en nuestro estado de ánimo: 1. Aguacate: aporta vitamina B6, la cual es vital para el mantenimiento del buen estado de ánimo, además de aportar minerales como el magnesio y el potasio. Su alto contenido en grasas saludables, por otro lado, son realmente saciantes y favorecen la pérdida de peso, en caso de que fuera necesario. 2. Fresas y cerezas: estos frutos rojos se caracterizan por tener un alto contenido en antioxidantes como la vitamina C y antoceaninas, las que favorecen también la producción de endorfinas. 3. Pescado azul: los alimentos ricos en Omega 3 favorecen el bienestar y la estabilidad de nuestras emociones. Mejoran nuestro estado de ánimo y previenen la depresión, por lo que la ausencia de este ácido graso, favorece un ambiente emocional inestable. El omega 3 se encuentra, asimismo, en las semillas de lino, semillas y de chía y en las nueces. 4. Chocolate negro: el chocolate negro es rico en flavonoides, que además de una gran acción antioxidante, favorece la producción de endorfinas, las cuales son conocidas comúnmente como las hormonas de la felicidad. 5. Cereales integrales: son ricos en un aminoácido denominado triptófano, el cual promueve la liberación de serotonina, la cual se encarga de controlar la ansiedad y el estrés. Este aminoácido se encuentra presente, asimismo, en huevos y el frutos secos. 6. Legumbres: las mismas poseen un aminoácido esencial denominado fenilalanina, el cual favorece la producción natural de endorfinas, además de mejorar la memoria, el aprendizaje y de mitigar los efectos de la depresión. Se encuentra presente, asimismo, en carnes, huevos y espárragos. A su vez, conviene mencionar que el alcohol y el café en exceso reducen los niveles de serotonina, por lo que no favorecen un estado de ánimo estable al proporcionarnos picos de energía muy variables.
Muchas personas recurren a la cafeína porque produce una sensación pasajera de "aumento de energía y concentración. No obstante, lo que se desconoce es que esta energía es la que se tiene almacenada químicamente en las células y que se libera con la cafeína, cuando deja de tener efecto aparece el agotamiento", concluye.
En conclusión, es recomendable incluir en nuestra alimentación diaria el mayor número de los alimentos anteriormente mencionados posible, con el fin de gozar de un estado de ánimo y de unas emociones estables y pacíficas.