El romanticismo se está perdiendo, o quizás tan solo está cambiando. Varias generaciones atrás los enamorados se pretendían con cartas.y mucha literatura. Napoleón le escribió en 1796 a Josefina de Beauharnais "no he pasado ni un solo día sin amarte, ni una sola noche sin estrecharte entre mis brazos, no he tomado ni una taza de té sin maldecir la gloria y la ambición que me mantienen alejado del alma de mi vida. En medio de las reuniones, a la cabeza de mis tropas, mientras recorro los campos, solo mi adorable Josefina está en mi corazón, ocupa mi mente, absorbe mi pensamiento".
Han pasado 228 años de esa carta, ¿qué pensaría Napoleón de la forma que tienen los jóvenes de relacionarse hoy en día? Desde luego a las parejas actuales no les hace falta tanta literatura ni intensidad, ahora basta con ir al HiperDino en Canarias o Mercadona en las horas de ligar.
Ligar en los supermercados
Las redes sociales se han hecho eco de la hora del amor en Mercadona a la que posteriormente se le sumó en Canarias el HiperDino. Para ligar hay que hacer todo un ritual: acudir de 18:00 a 19:00 horas y colocar un plátano de Canarias en tu carro. En Mercadona es una piña al revés y una hora más tarde. Los interesados deben ir al pasillo de los vinos y si chocas tu carro con el de otra persona que tenga la piña del revés es que ha surgido lal primera chispa del amor —en teoría—.
"Antes los cambios en la manera de ligar ocurrían cada siglo pero actualmente cada vez evoluciona más rápido, desde Tuenti hasta esta moda del supermercado han pasado muy pocos años en comparación con lo que se sustentaba en el feudalismo donde el matrimonio era solo un intercambio por dinero o tierras, o el romanticismo con las cartas", explica la psicóloga, terapeuta de parejas y sexóloga, Cintia Brito.
"Ahora con el avance de las redes sociales y la inteligencia artificial creemos que la manera de relacionarnos cambiara aún más rápido, en unos cinco o 10 años tendremos otra manera totalmente diferente de relacionarnos, un ejemplo de ello es el matrimonio entre humanos y androides", subraya Brito.
Nuevas necesidades
A pesar de que lo de Mercadona e HiperDino no es más que una forma —muy astuta— de hacer marketing, Brito considera que se ha plasmado una necesidad real. "Existen cada vez más divorcios y cada vez menos casamientos, pero queremos seguir encontrando pareja y buscamos cualquier manera de hacerlo factible" y asegura que "debido a la altísimo precio de la calidad de vida, como el alquiler, se hace casi imprescindible vivir en relación para repartir la riqueza y las deudas".
"En las sociedades postmodernas altamente individualizadas, la construcción de vínculos fuertes para el desarrollo de una identidad propia se contempla como una cuestión difícil de alcanzar. Parece que a la sociedad no le está funcionando nada de lo que hace; ni en el bar, ni en el gimnasio, ni Instagram ni Tinder. ¿Funcionará el supermercado? Para algunas personas sí, para otras no sé sabe", reflexiona la psicóloga.
Las relaciones actuales
Para Brito, cada vez es más complicado generar vínculos románticos con otras personas debido al amor a la independencia y la moda de las relaciones sanas. "Se ha puesto tan de moda eso de tener relaciones sanas que se han vuelto desechables a la mínima que no cumplan tus expectativas de lo que es sano e ideal".
"En la actualidad las aplicaciones de citas permiten visualizar todo el mercado de parejas potenciales de un vistazo, por último, en coherencia con la lógica de la cultura consumista, las nuevas tecnologías facilitan el refinamiento de los gustos personales, se genera la creencia de que cuántas más experiencias se tiene más se aprende sobre el amor. Todo esto hace que las personas se vean como nuevos estímulos de los que acabamos cansandonos", concluye la psicóloga, terapeuta de parejas y sexóloga, Cintia Brito.