El Servicio de Vigilancia Aduanera y la Guardia Civil han intervenido 200 kilogramos de cocaína que se encontraba adosada en el interior de una de las toberas de refrigeración del buque Nord Mamore, que repostaba en Santa Cruz de Tenerife. La operación tuvo lugar mientras el barco efectuaba una parada técnica para aprovisionarse de combustible en su ruta desde Brasil hasta el puerto de Lisboa, precisan la Guardia Civil y la Agencia Tributaria este jueves en un comunicado.
La intervención ha sido fruto de una de las visitas de fondeo que viene realizando la Sección del Resguardo Fiscal y Fronteras de la Guardia Civil del puerto de Santa Cruz de Tenerife de forma conjunta con la Unidad Combinada de Vigilancia Aduanera. En este caso, en la madrugada del 5 de agosto se procedió a la realización de una visita al buque de carga denominado Nord Mamore, que estaba fondeado en la zona de fondeo número 2 del puerto de la capital tinerfeña para repostar combustible.
Hasta ocho fardos
La carga declarada era de maíz, con destino al puerto de Lisboa, detalla la nota. Durante el transcurso de la inspección de la carga y del resto de zonas comunes de la embarcación, fueron detectados hasta un total de ocho fardos. El hallazgo se produjo durante la revisión de una tobera de toma de agua de refrigeración de la maquinaria del buque, efectuada desde el exterior del casco por buzos de la Guardia Civil.
Los fardos se encontraban atados en el interior de la tobera y entre sí cuando fueron localizados por los submarinistas. Tras el análisis de los paquetes resultó que en su interior se detectó la presencia de sustancias estupefacientes, concretamente cocaína, con un peso total de 200 kilos.