Sobre las 16:30 de la tarde de este miércoles familiares, políticos y vecinos se han congregado a las puertas de las Casas Consistoriales en Las Palmas de Gran Canaria para despedirse para siempre de Jerónimo Saavedra.
El cortejo fúnebre lo trasladó hasta el cementerio de Vegueta, donde descansan los restos mortales de otros grandes ilustres como como el doctor Chil, el alcalde López Botas, artistas como el pintor Néstor Martín Fernández de la Torre o el poeta modernista Tomás Morales, o prodigios universales como el tenor Alfredo Kraus y a partir de ahora, el gran Jerónimo Saavedra.
Despedida del ministro
Visiblemente afectado, Ángel Víctor Torres, el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática ha manifestado que Saavedra es una figura "irrepetible, insustituible" a la que va a echar muchísimo de menos y que "jamás" se llegará a ser lo que él fue.
"Que sea siempre un faro que nos alumbre y nos lleve en el sentido y en la senda correcta", ha deseado Torres, quien ha trasladado las condolencias a la familia en nombre del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de quien ha dicho que Saavedra era íntimo amigo, además de compañero socialista.
Llegada al cementerio
La capital cerró varias calles para trasladar el ataúd en el coche fúnebre desde la plaza de Santa Ana hasta el cementerio de Vegueta mientras una oleada de cientos de personas acompañaban a paso lento el coche que portaba los restos mortales del político —entre ellos, el cronista oficial de la ciudad, Juan José Laforet, o el rector de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Lluis Serra, así como el presidente de su Consejo Social, Ángel Tristán—.
No fue hasta las 17:45 aproximadamente cuando llegaron al cementerio donde un cura invitó a rezar un Padre Nuesto y un Ave María antes de cerrar el nicho del primer presidente de Canarias.
Sensibilidad
En esos momentos de máxima tristeza su familia le tiró rosas rojas con las que permanecerá en el descanso eterno mientras cantaban "mientras recorres la vida, tú nunca solo estás,
contigo por el camino santa María va" y al acabar una mujer quiso dedicarle un último canto religioso.
"Resucitó, resucitó, resucitó, aleluya, aleluya, aleluya" terminaron cantando todos los asistentes en un suave murmullo que acompañaba la imagen del ataúd entrando en su nicho. Un nicho que yace en el cementerio que alberga personajes de especial relevancia en Canarias. Desde los restos mortales del tenor Alfredo Kraus y frente al cantante de ópera descansa el poeta canario Tomás Morales. En el primer departamento del cementerio yacen los restos de Pedro Bravo de Laguna y Joven de Sala o los del futbolista Pepe Gonçalves.
A las 18:20 de la tarde todas las personalidades políticas que se habían acercado al cementerio se retiraron junto a la familia de Saavedra, que falleció en la mañana del martes a los 87 años de edad.