La huelga general está sobre la mesa de Comisiones Obreras (CCOO) y UGT, pero todavía es muy pronto para hablar de ella. Inocencio González, secretario general de CCOO en Canarias, y Manuel Navarro, su homólogo de UGT en las Islas, lanzaron la piedra este lunes en un encuentro con los medios anunciando movilizaciones. Fuera de la rueda de prensa, González matiza a Atlántico Hoy que "para una huelga general habría que trabajar muchísimo más, y el tiempo que tenemos no es mucho".
Los sindicatos lanzan a sus afiliados este miércoles a las calles en toda España, con concentraciones delante de las sedes de la CEOE en Tenerife y la CCE en Las Palmas de Gran Canaria en el caso del Archipiélago, tras la ruptura de las negociaciones del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). En ellas, pedían incrementos salariales de al menos el 3'5% para 2022, 2'5% para 2023 y 2% para 2024, junto a clausulas de revisión salarial por cada año en base al IPC.
Corresponsabilidad empresarial
El gran miedo de los sindicatos: que los trabajadores reduzcan su capacidad adquisitiva por los coletazos de una inflación que ya está por encima del 10% debido a los efectos macroeconómicos de la guerra en Ucrania. Su intención era que los salarios pudiesen actualizarse cada año, pidiendo corresponsabilidad a las patronales después de que el Estado haya inyectado subvenciones millonarias para paliar los efectos de la crisis sanitaria. Solo en Canarias, unos 1.140 millones de euros de manera directa.
Quedó en una reivindicación, porque las patronales se negaron en rotundo. Y, ante la ruptura de las negociaciones, los sindicatos apostaron por la movilización. "Salario o conflicto" es, de hecho, su lema. "Esta ruptura por parte de la patronal, que espera que la clase trabajadora asuma la crisis de precios, nos fuerza a tener que llevar a cabo dos vías de actuación: llevar nuestra propuesta salarial a cada uno de los convenios que estemos negociando actualmente y caminar por la senda de la movilización para que la parte empresarial ceda", afirma Comisiones Obreras en un comunicado interno.
La huelga general hay que prepararla
Suenan tambores movilizadores en las calles, pero el horizonte de la huelga general aun queda lejos. Depende de muchos factores, según relata Inocencio González a Atlántico Hoy, entre ellos la distensión del conflicto bélico en el tiempo, la duración de la excepción ibérica en el desacople del gas en el precio de la energía o de la escalada de precios en los carburantes. Y, por supuesto, de las propuestas que haya sobre la mesa en las negociaciones con las patronales conforme estos factores varíen.
Una negociación que, ahora mismo y al no existir un Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva de referencia, está "atomizada", dependiente de los acuerdos a los que llegue cada comité de empresa, según relata González a este medio. Si las patronales no ceden en su negativa y la inflación se mantiene, se planteará la huelga general. "Ese será el escenario", afirma Inocencio González a Atlántico Hoy.
El panorama movilizador ya está en marcha. En Canarias, González cita algunos ejemplos donde los sindicatos llevan tiempo trabajando y ahora tratan de "mantener la llama" y preparar huelgas efectivas. Los convenios de la hostelería o el comercio, en Las Palmas, son dos de ellos.
Falta presencia en los centros de trabajo
Pero hay un problema de raíz: falta presencia en los centros de trabajo. "La calle la estamos recuperando muy lentamente después de dos años de pandemia pero, si queremos ganar la calle, primero tenemos que ganar los centros de trabajo. Una huelga general no sólo tiene que tener motivos para convocarla, también tiene que tener la garantía de que no te va a salir como un petardo. Estas cosas hay que trabajarlas. No es levantarte hoy, pensarla y ya está todo para el próximo mes".
González tiene claro que el descontento acumulado de los trabajadores tiene que canalizarse a través de la acción sindical para ponderar el siguiente paso. "Creo que va a haber un invierno y un otoño muy calientes a nivel sectorial y de empresa", afirma, en cualquier caso, con rotundidad.
Recuperar afiliados
Esta movilización es clave para Comisiones Obreras después de haber cerrado 2021 con una tendencia de bajas a nivel estatal que superaba a las altas. Algo que obligó al sindicato a elaborar un plan de choque para recuperar esa afiliación y preparar este nuevo horizonte movilizador del que habla González.
Canarias, en cualquier caso, siempre se mantuvo, según el secretario general, con una "tendencia impositiva". Ahora mismo, el Archipiélago tiene en torno a 38.400 afiliados a Comisiones Obreras y en una línea de crecimiento "bastante aceptable" según su secretario general.
"Que alguien que pierde capacidad de compra mantenga entre sus gastos la afiliación es algo significativo", afirma optimista.