El Gobierno de España quiere empezar “ya” a trabajar en la modificación de la ley del menor para imponer a las comunidades autónomas el reparto de los menores migrantes que llegan a Canarias. Desde el Ejecutivo regional han reclamado desde hace varios meses un mecanismo de corresponsabilidad y no de solidaridad entre territorios que permita la distribución de los menores tutelados, que superan los 4.000 en las Islas.
Pese a esta elevada cifra, en los últimos dos años el reparto de los menores migrantes se ha situado en los 700 menores. Esto implica que el sistema de acogida y atención canario se ha visto sobredimensionado en comparación con otras comunidades autónomas. En este sentido, la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha asegurado este martes, en su segunda visita a Canarias, que se pondrán “manos a la obra ya” para las “modificaciones legislativas pertinentes”.
Modificación legislativa
En este sentido, ha avisado de que al tratarse de una modificación legislativa será necesario el respaldo del congreso, ante lo que la ministra ha resaltado la necesidad de trabajar en el consenso entre partidos y que se “haga con una escucha activa y de la mano con las diferentes comunidades autónomas”. Esta modificación ya se abordó en la conferencia sectorial celebrada el pasado 28 de diciembre tras la que también se anunció la reforma del Reglamento de Desarrollo de la Ley Orgánica de Extranjería.
En el sentido de esta conferencia la ministra ha hecho hincapié en que la respuesta a la migración no es “opcional” sino que es una cuestión de Estado. Así, ha asegurado que en el seno de la conferencia sectorial se han creado “diferentes grupos de trabajos técnicos” que comenzarán a trabajar una vez terminen las fiestas. “Iremos abordando las cuestiones que las comunidades autónomas solicitaron”, ha resaltado la ministra.
La tutela en Canarias
Por el momento, Canarias tutela a más de 4.500 menores, cifra que se ha visto especialmente aumentada tras las llegadas de octubre y noviembre. “Por mucho que las ONG se desvivan no les podemos garantizar un proyecto de vida, y esa es la preocupación de ambos gobiernos", ha valorado el presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, tras la reunión con la ministra.
Por el momento, no han podido dar cifras de si se van a realizar nuevos repartos entre comunidades, y lo relegan a la celebración de una nueva conferencia sectorial entre comunidades, donde se verán también la voluntad de las comunidades. La cifra que sí ha dado Clavijo es el coste de la crisis migratoria, que ha elevado a 104 millones de euros, y para la que ambas administraciones están en busca de más financiación.
La mayor cifra de llegadas
El presidente de Canarias ha señalado tras la reunión con Sainz que tras la llegada de 40.027 personas de forma irregular en 2023 les “preocupa” planificar 2024. “Mientras haya una diferencia de PIB per cápita de 10 a 1 de Europa y África es humano, normal y hasta razonable que la gente quiera ir huyendo del hambre, la muerte y la miseria, buscando un futuro mejor para ellos y para sus hijos”, ha valorado Clavijo sobre la causa migratoria.
Así, al respecto de que España sea el segundo país que más llegadas irregulares ha registrado, principalmente por la posición de Canarias, la ministra ha puesto en valor el acuerdo alcanzado al respecto del Pacto de Migración y Asilo, un acuerdo cuestionado por las organizaciones sociales y en un primer momento por Coalición Canaria, aunque el presidente regional lo ha valorado este martes como “esperanzador”. “Después de siete años, por lo menos tenemos un principio de acuerdo”, ha destacado.
Al respecto del mando único, el gran reclamo del Gobierno regional, la ministra ha dejado de lado la opción insistiendo en que “el mejor ejemplo de la manera de funcionar de este gobierno es que en esa reunión con las comunidades autónomas la presencia de todos los ministerios implicados”.
En la segunda visita de Sainz a Canarias, la ministra visitará los Centros de Atención Temporal a Extranjeros de Las Canteras y Las Raíces, en La Laguna.