El Gobierno de Canarias ha decretado la situación de alerta por fenómenos costeros en todo el archipiélago desde este viernes a las 20:00 horas debido a vientos intensos con fuerza cinco a siete, así como fuerte marejada con amplias áreas de mar gruesa y mar de fondo del noroeste de tres a cinco metros.
Las Islas sufrirán mal estado general de la mar desde la noche de este viernes y, según previsiones de la Aemet, se mantendrá hasta, como mínimo, el domingo. Todo ello junto a intervalos nubosos y probabilidades de lluvias débiles, sobre todo en la provincia occidental, como en las islas de La Gomera y La Palma.
Olas de cuatro a seis metros
La fuerza del viento del nordeste será entre cinco a siete - de entre 30 y 60 kilómetros por hora -, más intenso en las vertientes del sureste y noroeste de las islas y en alta mar entre ellas. Habrá también fuerte marejada con amplias áreas de mar gruesa y mar de fondo del noroeste.
El oleaje afectará, asimismo, a las costas del Archipiélago abiertas al norte y al oeste con olas de cuatro a seis metros, e incluso no se descarta olas puntuales más grandes, y mareas vivas asociadas con la luna llena.
Lluvias débiles
Las pleamares del sábado serán a las 00.55-01.35 horas y 13.15-14.00 horas; las del domingo a las 01.25-02.05 horas y 13.40-14.20 horas, y las del lunes a las 01:50-02:30 horas y 14:10-14:45 horas.
Las temperaturas rondarán entre las mínimas a 16ºC y máximas de 21ºC. La probabilidad de lluvias débiles es más alta en Gran Canaria, Tenerife y La Palma, seguidas de La Gomera y El Hierro. Las islas orientales, Fuerteventura y Lanzarote parecen librarse del chipichipi. Esta situación se vivirá sobre todo en el norte de las islas, acompañado de intervalos nubosos.
Recomendaciones del Gobierno
Debido a esta situación adversa, el Ejecutivo autonómico recomienda proteger las viviendas ante la posible invasión de agua del mar, no situarse en los extremos de muelles, espigones ni cerca de donde rompen las olas, evitar la pesca en zonas de riesgo y no circular con vehículos por carreteras próximas a la línea de playa.
Se pide a la población evitar bañarse en playas alejadas, con bandera roja o donde haya fuertes oleajes, así como que no se realicen prácticas deportivas y náuticas en las zonas afectadas por el mar de fondo, ni acampe en los arenales. A quienes tengan embarcaciones, les insta a asegurar su amarre en un lugar resguardado.
Si una persona cae al agua, el Gobierno le recomienda que se aparte de donde rompan las olas, pida auxilio y espere a que se le rescate. Si intenta salir y es arrastrado por el oleaje, lo mejor es que procure calmarse, no nade a contracorriente y se deje llevar hasta zonas donde la corriente pierda intensidad y pueda nadar.