La picaresca para evitar hacer un examen para el que no se ha estudiado puede llegar a límites insospechados. Un dolor de barriga simulado, una tos provocada o incluso algo extremadamente peligroso que se está poniendo de moda entre los jóvenes estudiantes de Gran Canaria y que puede suponer un delito de cárcel: una falsa llamada de amenaza de bomba.
La Guardia Civil en Gran Canaria, alerta de las consecuencias penales y civiles que conlleva la movilización de medios que en una falsa amenaza de bomba como las que se están llevando a cabo en diferentes centros de educación secundaria de la isla de Gran Canaria.
Grabar las consecuencias para conseguir seguidores
Este tipo de falsas alarmas, que se está convirtiendo en una práctica habitual, se están realizando con la intención de evitar los exámenes que se llevan a cabo en estas fechas de final de curso para la cancelación de las clases, evitando así el cumplimiento de los horarios lectivos. Además, estas acciones se ven incentivadas por vídeos e imágenes en redes sociales por los jóvenes para aumentar sus seguidores y si consiguen grabaciones de las consecuencias y los medios movilizados tras este tipo de alertas hacer los vídeos virales.
Este tipo de hechos se actúa como si se tratara de casos reales, por lo que se activa con la máxima rapidez y urgencia los recursos más cercanos para evacuar a las personas de los centros educativos y acordonar la zona afectada, habilitando una zona de seguridad en los alrededores para la posterior actuación del Grupo de Desactivación de Explosivos (GEDEX) especialistas en este tipo de amenazas.
Cárcel y pago de multas administrativas
Por otro lado, y debido a la gravedad de este tipo de amenazas, el procedimiento habitual es movilizar los medios y servicios de emergencias necesarios como son los bomberos y las ambulancias, lo cual tiene unas consecuencias administrativas y económicas.
Además, la Guardia Civil advierte que los autores que lleven a cabo este tipo de acciones incurren en el delito de desórdenes públicos. Quien afirme falsamente o simule una situación de peligro para la comunidad o la producción de un siniestro a consecuencia del cual sea necesario prestar auxilio a otro, y con ello provoque la movilización de los servicios de policía, asistencia o salvamento, será castigado con la pena de prisión de tres meses y un día a un año o multa de tres a dieciocho meses.