Más de 7.000 estudiantes podrán beneficiarse de las guaguas lanzaderas anunciadas para el próximo curso por el Cabildo de Tenerife. Se reactivarán los trayectos desde Icod de Los Vinos y Los Realejos y se suman dos nuevos, La Orotava y Costa Adeje.
Este último cumple así con una de las grandes demandas de los propios alumnos. Cabe recordar que dos de ellos, Andrea Carrero y David Bonalde, propusieron la que sería la primera línea de guagua entre el sur de la isla y el intercambiador de La Laguna.
Este viernes la presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, explicó que más de 7.300 jóvenes se desplazan desde el norte y desde el sur. Recordó que el año pasado se pusieron en marcha las dos guaguas lanzaderas y ahora se duplican, y resaltó que desde la zona sur vienen 3.300 estudiantes.
Preocupación por los horarios en el norte
La noticia de las guaguas lanzaderas alegra a universitarios y ex universitarios. No obstante, preguntados varios alumnos por Atlántico Hoy, los horarios son una de las cuestiones que preocupan a los alumnos que vienen de la zona norte. “Solo hay una hora de salida, que es por la mañana, así como una hora de vuelta. Si sales más tarde de clase, porque yo muchas veces salgo a las 15:00 horas, no tengo lanzadera para volver”, apunta Estefanía. También han generado dudas en los alumnos que van de tarde. “A mi me vendría genial, pero tengo turno de tarde y la lanzadera solo sale por la mañana”, insiste Manuel, que vive en La Orotava.
Con respecto a los horarios, la propia presidenta de la institución insular insistió en que están ajustados a horarios adecuados para entrar a la Universidad, así como las frecuencias. Recordó a su vez que las dos primeras lanzaderas del año pasado fueron "una medida eficaz" y muy "celebradas por los universitarios".
El caso del sur
La línea con el sur es una demanda que desde el mes de abril han dado voz los dos alumnos universitarios que la solicitaron. A través de diferentes plataformas, entre ellas su cuenta de Instagram, pedían esta conexión con el intercambiador de La Laguna y animaban a los demás alumnos a firmar la propuesta.
Sheila, que fue estudiante de la ULL y acabó su grado hace cuatro años, explica a Atlántico Hoy que es una conexión necesaria. “Tuve que ir a vivir a La Laguna durante toda la carrera porque no tenia coche y era muy complicado coger la guagua hasta mi facultad, que estaba en Guajara”. Lo mismo para Esther, que desde Candelaria tenia que coger dos guaguas o guagua y tranvía para llegar a su campus en la zona de Padre Anchieta.