El extenista y entrenador Emilio Sánchez Vicario ha alabado la grandeza, la humildad y la entrega de Rafa Nadal, un “superhéroe” que se ha mostrado al mundo a través del tenis, marcando una época y que deja un legado que ni los más expertos habían conseguido lograr, asegura.
En un artículo recogido en su blog, Sánchez Vicario repasa con detalle la trayectoria del tenista de Manacor, en el momento de su retirada, y los momentos compartidos con él, centrándose en la grandeza que lo han hecho único o casi “extraterrestre”, conforme iba rompiendo barreras en el mundo del tenis.
Toni Nadal
Recuerda que de la mano de su tío Toni, que le entrenó tenísticamente, también trabajó un pilar que fue fundamental, la mente: “Se centró principalmente en crear a un guerrero que pudiera crecerse cuando mayor fuera la adversidad; logró trabajar la mente para que las emociones no se convirtiesen en frustración, para lograr la simplicidad en los patrones tácticos y para que su físico y su mente se volviesen privilegiados, repitiendo y repitiendo hasta crear hábitos de comportamiento”, escribe Sánchez Vicario.
El también fundador de la Emilio Sánchez Academy rememora el momento cuando él tomó las riendas del equipo español de la Copa Davis. “Entendí al otro Rafa cuando conocí a su madre, que era la pieza que completaba el puzle. Su madre le aportaba la humildad, la cercanía, la dulzura, era el polo opuesto a la personalidad del padre, y la combinación resultante es Rafa”.
En este sentido, Sánchez Vicario recuerda que Rafa también es un poco la suma de todos, de sus padres, su fisio Maymó, su doctor Ruiz-Cotorro, su mánager Costa o su tío Toni.
Entrenar, una experiencia
En el artículo, Sánchez Vicario también hace hincapié en cómo entrenar con Rafa Nadal es casi como jugar una final. “Rafa ha sido el ejemplo de cómo entrenar con la máxima intensidad, no hay un golpe al que no le ponga el máximo foco, su concentración y esfuerzo, es tal que muy pocas veces le verás no eligiendo bien su repertorio. Empieza al 100% en cada golpe, en cada punto, en cada juego, en cada set, en todo el partido”.
Para el tenista español, la grandeza de Rafa Nadal es difícil de resumir, es como un estado excepcional de rendimiento y superioridad en cada momento de la batalla, encontrando la menara de ser mejor que los demás en los momentos clave de los partidos.
Sánchez Vicario, que se declara fan de Rafa, explica que lo es por su propia grandeza. “Sus 4 C’s: condición, cabeza, corazón y coraje”, añade. “A partir de ahora, aunque no juegue más, quedará su legado, su manera, su filosofía y sus superpoderes, que éstos sí se pueden enseñar. Tiene ante sí un nuevo reto en su vida, seguro que encontrará fórmulas para seguir marcando la diferencia”.
Emilio Sánchez Vicario finaliza su artículo con un agradecimiento a Nadal, por haberle permitido aprender e inspirar a todos. “Hoy no es un adiós, porque viéndote esto días animando en la Davis, sé que seguirás cerca y que podrás aportar esta Grandeza en tantas otras cosas que hagas”.