Las enfermedades inflamatorias intestinales tienen un diagnóstico “complicado y lento”, ya que, en un 45% de los casos, se puede tardar más de un año en lograr un diagnóstico exacto desde la aparición de los primeros síntomas, extendiéndose a más de 5 años en un 17 % de los afectados, conforme a estudios basados en ensayos con pacientes de Gran Canaria, entre otros.
Además, según un informe del Grupo Español de Trabajo en Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa (Geteccu), en España hay más de 300.000 casos, de los cuales entre 85.000 y 150.000 son pacientes de colitis ulcerosa, y se estima que alrededor del 25 % de las personas inician el proceso inflamatorio antes de los 20 años.
Aspectos cotidianos
Esta enfermedad condiciona aspectos cotidianos como viajar en transporte público, estar con amigos o asistir a una reunión de trabajo, dado que su síntoma más destacado es la incontinencia para ir al baño.
La colitis ulcerosa es una enfermedad inflamatoria del intestino que, además de la urgencia por ir al baño de forma constante, puede provocar fatiga, dolor abdominal o aumento de las tasas de depresión y ansiedad.
Nuevo tratamiento
Para esta patología concreta, el director médico de Lilly España, José Antonio Sacristán, ha anunciado un nuevo tratamiento, disponible en España e incluido en la financiación pública del Ministerio de Sanidad, que ayudará a mejorar la calidad de vida de pacientes adultos con colitis ulcerosa de moderada a grave que no responden o han perdido respuesta al estándar de tratamiento.
En una entrevista, ha destacado que el impacto sobre su funcionalidad es “enorme” ya que afecta a sus relaciones sociales, familiares o de pareja: “Al final son pacientes que muchas veces se quedan recluidos en su casa por miedo a la urgencia defecatoria”.
No todos son controlables
En este sentido, el gastroenterólogo del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, Ignacio Marín-Jiménez, ha añadido que, con los tratamientos actuales, no se pueden controlar los síntomas del cien por cien de los pacientes, ya que “hay un porcentaje no desdeñable, alrededor de un 30%, que, a pesar de disponer de una variedad de tratamientos significativa, no alcanza la remisión”.
En los estudios realizados con el nuevo tratamiento, el 49,9 % de los pacientes con colitis ulcerosa alcanzó a las 52 semanas la remisión clínica (sin síntomas a largo plazo) y endoscópica (sin inflamación del colon), y el 43,3 % de los pacientes consiguió asimismo la remisión histológica-endoscópica (sin inflamación activa del tejido y el colon).
Los pacientes
En estos ensayos clínicos, que han tenido lugar en centros españoles de Madrid, Santander o Gran Canaria, han intervenido pacientes que no habían recibido tratamiento nunca junto a otros que habían perdido respuesta o no toleraban los anteriores.
Por su parte, la gastroenteróloga Mariló Martín, del Hospital Universitario de la Paz, en Madrid, ha explicado que el control de síntomas se ha superado en el 70 % de los pacientes y que han mejorado otros síntomas “importantes” para ellos como el dolor abdominal.
Escala de urgencia defecatoria
Así pues, el director médico de Lilly España -compañía que ha colaborado con EFE en la difusión de este contenido- también ha resaltado que otro de los avances del nuevo tratamiento es la creación de una escala que mide la urgencia defecatoria.
Hasta ahora, explica Sacristán, este síntoma se medía en las consultas de forma cualitativa o de forma binaria, es decir, si existía la urgencia o no, y su propuesta pasa por una escala numérica de 1 a 10 que permite separar mejor el impacto de este síntoma en los pacientes.