El dispositivo de emergencias de Canarias ya está en Valencia para apoyar en la crisis causada por las recientes inundaciones, describiendo la situación como “dantesca e inabordable”, según el consejero de Política Territorial, Manuel Miranda.
Con una fuerza de 70 efectivos, el equipo canario se enfoca en tareas de achique de agua y limpieza en las áreas de Alfafar y Massanassa, dos de las zonas más afectadas por las intensas lluvias.
Coordinación
Miranda, quien informó al Consejo de Gobierno sobre esta misión, subrayó la importancia de la coordinación y rapidez del dispositivo, que fue desplegado desde Canarias el pasado fin de semana.
El contingente canario aterrizó en Valencia en la madrugada del lunes y se organizó de inmediato para comenzar las labores. El resto del equipo y material de apoyo se irán integrando en los próximos días para reforzar las operaciones.
Objetivos
A primeras horas de la mañana, el subdirector de Protección Civil y Emergencias de Canarias, Néstor Padrón, se reunió con el Puesto de Mando Avanzado (PMA) en Paiporta para definir las misiones de cada grupo en Valencia.
La intervención del equipo canario se centrará en achicar agua en sótanos, garajes y viviendas, además de realizar tareas de limpieza y desagüe en las áreas inundadas, con el objetivo de restaurar la normalidad en las zonas afectadas.
42 bomberos
La delegación está compuesta por un equipo especializado, incluyendo 18 bomberos de Tenerife, 20 de Gran Canaria, y 4 de Lanzarote, junto con efectivos del Grupo de Emergencias y Salvamento (GES), Equipos de Intervención y Refuerzo en Incendios Forestales (EIRIF) y Brigadas de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIFOR) del Cabildo de Tenerife.
Además, el Servicio de Urgencias Canario (SUC) y el Servicio Canario de la Salud (SCS) han enviado un equipo médico para asegurar la atención sanitaria de los operativos.
Tensión social
Las tensiones sociales en Valencia han aumentado tras la visita de los Reyes y el presidente Pedro Sánchez a Paiporta, donde se registraron incidentes durante su recorrido.
El consejero Miranda expresó su comprensión ante la frustración de los ciudadanos, destacando que la “desesperación” en situaciones tan graves es comprensible, aunque enfatizó que el Gobierno de Canarias no justifica la violencia.
Impotencia
“La gente está viviendo una situación dramática; muchos han perdido sus hogares y su forma de vida. Es normal que reaccionen con impotencia cuando ven a las autoridades. Las emociones están a flor de piel en medio de esta calamidad”, comentó Miranda.
El dispositivo canario continuará su labor en Valencia hasta que las autoridades consideren que la situación está bajo control, demostrando así el compromiso de Canarias con la ayuda en emergencias a nivel nacional.