La relación que mantienen Santi Yusta y el Club Baloncesto Gran Canaria es, cuanto menos, peculiar. Sus caminos se han cruzado en varias ocasiones y en algunas circunstancias hasta parecían condenados a protagonizar un final feliz. Hay varios capítulos que lo corroboran y que, por su trama y desenlace —con actuaciones destacadas, derbis canarios, contratos firmados y arrepentimientos—, dan para un culebrón.
El segundo partido que el alero disputó en la Liga Endesa —enrolado en las filas del Real Madrid y con apenas 18 años— fue frente al equipo claretiano, un rival contra el que una vez —en su primer año como jugador de Obradoiro— dejó entrever el potencial que se le presuponía en su etapa júnior al anotar 19 puntos. Aquello fue en su primer día grande en la ACB, competición en la que ha vivido el derbi canario, pero desde la trinchera del CB Canarias.
¿Cuándo se firmó?
De tanto rozarse, este año el Granca se lanzó a por su fichaje. Y después de meses de acercar posturas, logró cerrar la operación. Sucedió en febrero, durante la Copa del Rey. La entidad amarilla y el agente del jugador alcanzaron un trato por tres temporadas que, sin embargo, no se cumplirá: el internacional español, al poco tiempo de firmar, se arrepintió y el CB Gran Canaria optó por liberarlo de su compromiso.
Fue Sitapha Savané, presidente del Granca, quien tomó la decisión. Consideró que era mejor no ejecutar el compromiso contractual que tener a disgusto a un jugador en la plantilla. La entidad claretiana, además, renunció a una posible compensación económica por el incumplimiento del acuerdo.
Badio y un cupo
La no ejecución del contrato de Yusta, por contra, sí ha generado ciertas tensiones entre el club y su agencia de representación —Romaior Sports—, con la que Willy Villar —director deportivo claretiano— también tanteó en febrero el posible fichaje de Brancou Badio. El escolta senegalés, uno de los factores que explican el temporadón del Baxi Manresa, sin embargo ha quedado fuera del alcance del CB Gran Canaria. Su futuro parece ligado al de Pedro Martínez en el Valencia Basket.
Entre medias, según ha trascendido estos días —publicado por La Provincia/DLP—, también se puso sobre la mesa la posibilidad de que Romaior Sports lograra un copatrocinador para el Granca a cambio de asegurar la presencia de varios de sus jugadores en el roster del equipo claretiano mientras el contrato entre club y empresa estuviera vigente.
Sin Yusta en la plantilla y con la marcha de Ferrán Bassas confirmada, la incorporación de un cupo de formación es uno de los objetivos prioritarios del Granca. Con Jovan Kljajic, Miquel Salvó y Jakub Urbaniak —ala-pívot polaco que la última campaña jugó en el filial claretiano de LEB Plata— en plantilla, los rumores apuntan que Carlos Alocén —base del Real Madrid— ocupará esa plaza.