La fuerte calima que engulló Canarias en febrero de 2020, la peor en 40 años, y que provocó el cierre de todos sus aeropuertos durante dos días, no solo arrastró a las islas miles de toneladas de polvo, sino también numerosas aves del desierto, algunas de rarezas nunca antes vistas en España. Así lo documenta el primer número de 2022 de Dutch birding, una revista dedicada a la avifauna de Europa y el norte de África.
Los autores de este trabajo subrayan que lo ocurrido aquellos días en Canarias gracias a la calima "no tiene precedentes" en esta zona del Atlántico. Por ejemplo, destacan "el número de ejemplares de collaba Isabel y de collalba desértica avistados supera al de avistamientos hasta la fecha en toda España".
Empujadas por el viento
Los vientos que provocaron ese fenómeno, particularmente intenso del 22 al 24 de febrero, empujaron hasta las islas a diferentes especies de aves. Algunas, en plena migración, pero otras, simplemente arrastradas hacia el Atlántico desde sus hábitats naturales en los desiertos del Sahara y el Sahel.
El resultado fue un nuevo universo para los ornitólogos y los cientos de visitantes que se trasladan a Canarias en invierno desde diferentes lugares de Europa solo para observar a las aves.
Ocho aves raras
Hasta ocho "rarezas” del Sahara, señala el artículo, se vieron aquellos días en las Islas. Había ocurrido ya con anteriores calimas, pero nunca con tantas especies, ni con tantos ejemplares ni, mucho menos, con avistamientos en prácticamente todas las islas.
Como ejemplo, se documentó en Gran Canaria un ejemplar de alcaudón del Sahara nunca antes visto en España, del que no es fácil encontrar un nombre de uso común en español: el Lanius elegans elegans, conocido en inglés como Desert grey shrike.
Alaemon aludipes
También se registró una alondra ibis (Alaemon aludipes) en Tenerife, que solo se había visto ocho veces antes en Canarias, pero siempre en las islas de la provincia de Las Palmas, las más próximas a las costa africana.
Además, se pudo contemplar en Tenerife y en Gran Canaria la alondra aplaudidora de El Cabo (Ammomanes cinctura), un pájaro del que solo constan cuatro avistamientos previos en las islas.
Más especies
Se contaron hasta 85 ejemplares de collaba desértica (Sylvia deserti), ave que solo había sido localizada ocho veces antes en las islas; uno de curruca del Atlas (Sylvia deserticola), avistada solo en tres ocasiones; y dos de curruca sahariana, de la que solo había seis precedentes.
Los aficionados a las aves fotografiaron y reportaron aquellos días en Canarias 27 ejemplares de collaba Isabel (Oenanthe isabellina), una especie que no es propiamente africana, pero que pasa los inviernos en la región del Sahara. Solo había dos referencias previas de su presencia en las islas.
Finalmente, se notificó en Tenerife la presencia de un ejemplar de collalba yebélica, que solo había sido documentada en Canarias dos veces con anterioridad, una en La Palma y otra en Lanzarote.