El Barranco de Masca es desde este 12 de julio el primer lugar de Canarias en tener una tasa turística con el fin de preservar el espacio natural del Parque Rural de Teno. De esta manera los adultos no residentes pagarán 28 euros --14 euros si son menores-- mientras que a las personas residentes se les cobrará 3 euros, --1,50 a niños--.
En un principio el documento por el que se anunciaba esta tasa, publicado en el Boletín Oficial de la Provincia de Santa Cruz de Tenerife este miércoles, indicaba que los residentes en Tenerife tendrían una tarifa especial, pero el Cabildo ha anunciado que estarán exentos de pagarla aunque sí deberán abonar el barco obligatorio para salir de la zona barranco o para llegar a él en el caso del ascenso. En un futuro también se requerirá el ticket de guagua.
Por ahora el control de acceso con el pago de la tasa será solo viernes, sábado y domingo para descender, en cupos de 25 personas y con un máximo de 275 visitantes por día. También se habilita a las 09:00 de la mañana un turno para las personas que quieran hacer el ascenso, y a finales de 2024 podría estar disponible para todos los días del año. Además, el objetivo de la institución insular es que en el año 2025 se aplique también a otros lugares de la isla como el Parque Nacional del Teide o algunas zonas de Anaga.
Barco obligatorio para poder acceder
El dinero recaudado de la tasa, más de dos millones de euros, se pretende destinar a la conservación del espacio a través de agentes de medioambiente, guías o vigilantes. Tal y como recordó la presidenta del Cabildo, Rosa Dávila, se trata de un trayecto fuerte al que no pueden acceder menores de ocho años debido a su dificultad, por lo que a través de este método se busca controlar el acceso y el número de personas --pasar de las 100.000 anuales a las 44.550-- que hacen el sendero, además de que vayan acompañados de guías profesionales --hay 18 personas trabajando-- y evitar entre otras cosas a los "guías piratas". A ello se suma, apuntó Dávila, la puesta en marcha del embarcadero que llevaba cerrado desde el año 2018, y que ahora estará vigilado por un guarda rural ya que solo se puede utilizar para ese fin.
En este sentido, para salir del barranco o llegar a él para realizar el ascenso los visitantes tendrán que contratar de forma obligatoria un servicio de barco a parte, cuyo coste es de aproximadamente 25 euros por persona. Preguntado por Atlántico Hoy, el director insular de Medio Natural, Pedro Millán, explicó que hay tres empresas de transporte que trabajarán de forma escalonada, y de igual forma alguna de ellas se mostró dispuesta a hacer un descuento especial al residente canario. "No depende del Cabildo, pero hemos tratado de que colaboren", dijo. Cabe destacar que se permitirá a un grupo hacer también el camino de subida.
Un 95% de las visitas a Masca son de turistas
El vicepresidente y consejero de Turismo insular, Lope Afonso, insistió en que se trata de "un compromiso necesario" y un tributo "que es finalista" ante la "demanda social y el consenso" para preservar la naturaleza a través de empresas de turismo activo. De esta manera recordó que un 95% de las personas que realizan este camino en Masca son turistas, por lo que Tenerife se posiciona como destino líder en "responsabilidad y sostenibilidad".
Un dato importante es que los vecinos no necesitarán ningún tipo de reserva para poder acceder a la zona, al igual que sus familiares o trabajadores. El fin principal, recordó la consejera de Medio Natural, Blanca Pérez, es que se invierta en las necesidades que posee el caserío de Masca debido a que los vecinos necesitan que sus condiciones de vida sean "las más aceptables" ya que se enfrentan a diario a masificación de personas y vehículos.