El colegio Luther King y el cambio de paradigma educativo en Canarias

El colegio Luther King es uno de los principales referentes educativos de Canarias con un modelo docente laico y basado en valores como la igualdad, la inclusión y la justicia

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El proyecto educativo de Luther King comienza a cimentarse desde las etapas más tempranas./
El proyecto educativo de Luther King comienza a cimentarse desde las etapas más tempranas./

El colegio Luther King es uno de los principales referentes educativos de Canarias. Su modelo docente, laico y basado en valores como la igualdad, la inclusión y la justicia, se ha adaptado a los nuevos tiempos y a las necesidades de los alumnos primando la innovación y la enseñanza de idiomas como base de una formación que busca la excelencia de su alumnado.

Según comenta Aarón Martín, jefe de estudios del centro de La Laguna (Luther King cuenta con otros dos instalaciones en San Miguel de Abona y Arafo, todos en Tenerife), en la actualidad se está viviendo un cambio de paradigma en la educación que comienza desde las edades más tempranas.

Idiomas

Con respecto a los idiomas, Martín puntualiza que Luther King es consciente de su importancia para la formación de los estudiantes, por lo que ya no se limita al bilingüismo sino se ha dado un paso más en busca del plurilingüismo.

“Estamos reforzando toda esta importancia que le hemos dado históricamente al inglés reforzando como segunda lengua el alemán o el francés” que entran en la formación curricular a partir de 3º de Primaria.

Hoy en día, en inglés se imparte el 50% de las asignaturas en infantil y educación primaria, si bien a partir del próximo año todas las asignaturas se trabajarán en español y en inglés. “Con este cambio mejoraremos la capacidad del alumno y su competencia para hablar en inglés de forma más natural”.

Hay que recordar que el Luther King es un colegio ADS (Apple Distinguished Schools), un centro de referencia que refleja la visión de Apple en cuanto al papel de la tecnología en la educación, que realiza intercambios con otros colegios con la misma consideración en países como Francia y Alemania para que sus alumnos se formen durante un tiempo en otras culturas.

Aprendizaje basado en proyectos

El jefe de estudios relata que el año pasado Luther King comenzó a trabajar en el aprendizaje basado en proyectos para que cada alumno vaya adquiriendo su propio bagaje. De esta manera, “el profesorado y los coordinadores están colaborando para crear una serie de proyectos que sean atractivos, motivadores y lleven a un aprendizaje mucho más profundo”.

Pone como ejemplo uno de sus últimos proyectos, relacionado con los juegos olímpicos. “A través de ellos los estudiantes pueden conocer las banderas de los países, las características de diferentes razas o los deportes propiamente dichos. El alumno, al sentirlo más vinculado a su realidad, lo interioriza de una manera más profunda”, explica.

Tecnología

Aportando valor añadido, los alumnos a partir del primer curso de primara entran en contacto con iPads que, ya en cuarto, se lo llevan a casa. Pese a ello, asegura que en ningún caso se descuida el método tradicional para empezar a escribir porque “ese componente de lectoescritura es muy importante”.

Sin embargo, desde el centro consideran que el iPad aporta “una serie de beneficios y ventajas que no se pueden lograr sin él. El iPad no viene a sustituir a la libreta sino a aportar una infinidad de posibilidades al docente para mejorar el aprendizaje de los alumnos en las diferentes materias”.

Todo ello como una forma de aprovechar las competencias digitales de los alumnos, que ya nacen rodeados de tecnología, algo que no sucede aun con los docentes, por lo que, en palabras de Martín, unos y otros aprenden “de manera recíproca”.

Un proceso lento que viene dado por el cambio de paradigma educativo, que requiere de “muchas horas de formación” para los profesores, pero que resulta clave porque "el docente ha entendido la necesidad de aliarse con la tecnología” para cuestiones como la creación de presentaciones que realizan los alumnos y que luego se puede incluso compartir con el resto de la clase.

Aprendizaje cooperativo

Otro de los ejes principales del Luther King es el aprendizaje cooperativo, en el que los alumnos tienen que conseguir una serie de objetivos trabajando en grupo. Ese trabajo propicia, entre otras muchas cosas, la capacidad de mejorar la comunicación oral, de convencer al compañero, rebatir sus argumentos y así tratarse de forma más empática, atendiendo a las diferencias entre cada uno.

Existen también talleres de conversación en inglés con docentes, desdoblando grupos para incentivar que una mayor participación de todos los alumnos y propiciar una educación más individualizada.

Resalta el entrevistado que, si hay una cuestión clave a destacar en este punto, el profesor ha dejado de ser el transmisor de los conocimientos para pasar a ser una guía en el aprendizaje. “Al principio siempre hay cierta resistencia, porque en muchos casos al alumno le resulta más cómodo recibir los conocimientos que tener que buscarlos él o ella misma. Eso lleva un proceso, pero es indudable que tiene numerosos beneficios para los alumnos”.

A su vez, se desarrollan en el aula diferentes dinámicas que promueven la iniciativa de los alumnos, como por ejemplo que los mayores expliquen determinados temas a los más jóvenes. También servicios a la comunidad, dígase la limpieza de playas, actividades que están encuadradas dentro de las diferentes asignaturas.

Trabajo por ámbito

En los cursos de bachillerato el enfoque ha sido ofrecer al alumnado proyectos innovadores en los que se trabaje por ámbitos, difuminando las barreras entre las asignaturas. Así, el alumno aprende a través de situaciones que traten los contenidos de las diferentes materias.

“Un alumno puede estar trabajando un proyecto que englobe contenidos de matemáticas, física y química o tecnología, lo que le permite verlo todo de manera más contextualizada y conectada con su realidad”, cuenta Martín.

Sin quitarle la importancia que tiene la Ebau para los estudiantes, reconoce el docente que en el bachiller no se limita a prepararlos para la prueba de acceso a la universidad. Aun así, hay diversas medidas para que sus alumnos defiendan de la mejor manera posible sus competencias.

Destaca la academia LK, que por las tardes ofrece a quienes lo deseen profesores a su disposición para resolver las dudas. Los escolares pueden organizarse ese horario vespertino según las materias que deseen trabajar, ya sea por refuerzo o por tener una prueba al día siguiente.

Emprendimiento e innovación

Otra de las novedades de los centros Luther King es el proyecto LK Carriers, a través del cual los alumnos de bachillerato se relacionan con mentores (antiguos alumnos del colegio), con lo que conocen de primera mano las profesiones que les gustaría desarrollar en el futuro, algo muy positivo.

Una iniciativa que está siendo muy bien valorada por los estudiantes ya que, como cuenta Aarón Martín, “muchos tienen una idea más bien romántica del trabajo y este proyecto le permite ratificar su intención de cursar el grado que pensaban estudiar o rechazarlo, que también habido casos”.

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