La ciudad paraguaya de Pilar, capital del departamento de Ñeembucú, limítrofe con el norte argentino, se halla en emergencia sanitaria desde este martes hasta el día 15 de diciembre debido a un rebrote de coronavirus que amenaza la capacidad hospitalaria de esa región.Esa pequeña localidad, situada 360 kilómetros al sur de Asunción, no cuenta con unidades de cuidados intensivos y el hospital de la XII Región Sanitaria se encuentra al 72 % de su capacidad, afirmó a Efe su director, Aníbal Espínola."Aparte, entre un 20 y 40 % de las muestras remitidas a Asunción tienen un resultado positivo, una tasa muy alta de positividad que nos indica que tenemos una circulación viral activa y permanente", argumentó el médico.Por este motivo, la Municipalidad local declaró el estado de emergencia sanitaria por 15 días, cuya principal resolución es la restricción de circulación entre las 21:00 y las 05:00 horas, "ante el gran aumento del número de casos en todo el departamento y en especial Pilar".El objetivo de la medida es la de "limitar con más efectividad el desplazamiento de vehículos, personas y la suspensión de actividades de ocio o de esparcimientos en barrios y compañías, que no se adecúen a los protocolos", según la resolución comunal.La pandemia del coronavirus ha dejado desde el pasado marzo en todo Paraguay un total 1.756 fallecidos por la covid-19 de 82.424 infectados registrados hasta este lunes en medio de un rebrote advertido tras una bajada en las cifras de decesos y contagios.De esa cantidad, 458 positivos corresponden a Ñeembucú, de los que 339 se registraron en Pilar, que en toda la pandemia reportó 18 decesos, explicó Espínola al tiempo de insistir que el sistema local puede colapsar por el ritmo de contagio.Asimismo, la precariedad del sistema sanitario del extremo sur del país obliga a que las muestras diarias sean enviadas a la capital cada 48 horas para su procesamiento, lo que condiciona la capacidad de reacción.Entre las muestras del sábado y domingo pasados se detectaron 60 positivos y los dos pacientes graves de esa ciudad, de unos 35.000 habitantes, tuvieron que ser evacuados a centros de alta complejidad de la capital."Si sigue esta tendencia en alza y los casos se van desarrollando en forma exponencial, el sistema de salud va a colapsar (...), lo que intentamos hacer es mitigar situación, aunque no sabemos si lo vamos a lograr", añadió Espínola sobre el toque de queda nocturno.A nivel país, las autoridades sanitarias advirtieron de la alta exigencia de los hospitales en coincidencia con la relajación social observada tras la liberación de las restricciones sociales."En el presente contexto, se insiste en la importancia de aferrarse a las medidas de higiene sanitaria como el lavado frecuente de manos, el uso de tapabocas y el distanciamiento físico, claves fundamentales para evitar la propagación de la enfermedad", recordó este martes el Ministerio de Salud en un comunicado.