Cualquiera que provenga de una tierra con rica tradición gastronómica sabe que existe un tipo de nostalgia que reside en el estómago. Los recuerdos de la tierra natal se arremolinan en la mente y el paladar exige viajar de nuevo a esas recetas que probamos en nuestra infancia y desde entonces se han convertido en parte de nosotros, en forma de alimento y también de cultura.
Bien sea por trabajo, turismo o cualquier otra circunstancia, los canarios que están lejos archipiélago se resignan a vivir sin mojo, ni pata asada, ni almogrote, ni miel de palma, ni vinos, ni quesos canarios, en otras dolorosas renuncias. Por eso algunos emprendedores canarios van sembrando la geografía del reino español de establecimientos donde superar esa magua culinaria, ese jilorio autóctono, esa añoranza de sabores que se apodera del isleño cuando pisa territorio peninsular.
Detenderete, en Madrid
En los últimos años uno de estos bares con sello canario ha ganado popularidad en Madrid, en el ámbito de la Casa de Canarias, con el nombre Detenderete. Bajo una estética de gastrobar que cumple a la perfección con las exigencias de los clientes capitalinos -quienes tal vez no apreciarían el encanto tradicional de un guachinche-, esta sucursal de la gastronomía canaria cosecha el aplauso unánime de sus clientes.
Así lo acreditan portales como TheFork, que le entrega el primer puesto entre los establecimientos canarios en Madrid, con una puntuación de 9,4 sobre 10. En esta línea, los usuarios de Tripadvisor le otorgan una nota de 4,5 sobre 5, de acuerdo a la puntuación de los usuarios de Google. Quizá la única advertencia para el canario es que las raciones y precios son propios de la capital, no de Santa Úrsula. ¡Ah! y tampoco tienen descuento de residente.
Raciones
En la carta del gastrobar Detenderete las raciones elaboradas con producto canario son protagonistas, por eso en sus ensaladas prima el aguacate de La Palma, bien con aceite de oliva virgen extra de Fuerteventura y sal de Fuencaliente, o con codorniz escabechada y huevo poché. Además, para untar, podemos pedir almogrote gomero o chorizo de Teror y acompañar con una tabla de quesos canarios o el queso asado de El Hierro con miel de palma de La Gomera.
Para abrir boca también tienen un entrante de peto herreño (atún canario) con pimientos de piquillo y cebolla, o la ensaladilla rusa con papita canaria y atún de La Graciosa. Todo ello sin olvidar la especialidad de la casa, un auténtico tesoro de la gastronomía canaria: pata de cerdo asada cuatro horas en el horno para conseguir esa ternura tan característica.
Entre sus platos más contundentes figura la tradicional ropa vieja, con su receta invariable desde 1940, así como la carrillera de ternera cocinada en vino tinto canario, el conejo deshilachado o el pulpo a la brasa con sal de La Palma. Por supuesto en su menú no pueden faltar las papas con mojo, que siempre de la mano con estos platos.
Pizzas, vinos y postres
Este bar guarda una sorpresa inesperada en su menú: pizzas elaboradas con producto canario. De pata de cerdo -o roast beef canario-, de quesos de las islas o de chorizo de Teror- el peperonni canario-, en Detenderete le dan una vuelta a las recetas tradicionales para convertirlas en uno de los platos más populares de la gastronomía mundial.
Con semejante despliegue de ingredientes, en su carta no podían faltar vinos como Flor de Chasna, Burmas de Ayosa, Viña Norte o Bermejo, entre otros canarios. Quienes prefieran cerveza también pueden echarse una Dorada o una Tropical, que a veces también se echan de menos.
A la hora de los postres también los golosos están de enhorabuena gracias a emblemas de la repostería canaria como el binemesabe o el polvito uruguayo. Traiga un par de cucharitas y así compartimos. ¡Oss me supo!