El aumento de la pobreza provocado por la pandemia de la covid ha multiplicado la población que no puede permitirse cosas que un año antes sí podía. Por ejemplo, uno de cada siete gallegos (14,6 %) y uno de cada diez canarios (10,7 %) no pueden llevar carne, pollo o pescado a su mesa al menos dos veces por semana.La Encuesta de Condiciones de Vida publicada esta semana por el Instituto Nacional de Estadística (INE) ha revelado grandes diferencias territoriales en este ámbito, algunas arrastradas de años anteriores y otras achacables a la irrupción del coronavirus en 2020.
Por encima de la media nacional
En esta carencia material que analiza el INE, junto a
Galicia y
Canarias también tienen tasas superiores a la media (5,5 %)
Baleares (8,7 %),
Murcia (8,0 %),
Andalucía (7,6 %),
Comunidad Valenciana (6,5 %) y
Extremadura (5,9 %), además de
Melilla, que llega al 15,2 %.
Cantabria ha multiplicado por más de cuatro el porcentaje de su población con esta carencia ( l3,7 %), la Comunidad Valenciana por 3,6 (6,5 %), Canarias por 2,3 (10,7 %), Baleares por 2,2 (8,7 %), Extremadura casi por dos (5,9 %), Galicia por más de 1,5 (14,6 %),
Andalucía por 1,5 (7,6 %),
País Vasco un 70 % (2,9 %),
Madrid un 26 % (3,4) % y Melilla por más de dos (15,2 %).
El problema de mantener la temperatura en casa
En INE también incluye en su estudio los porcentajes de la población que no puede permitirse mantener la vivienda con una temperatura adecuada o disponer de un ordenador.Respecto al primero, los dos archipiélagos tienen los porcentajes más altos de hogares con este problema en 2020. 20,4 %
en Canarias y el 19,8 % en Baleares, y Melilla les sigue con un 15,4 %. En los tres casos con subidas importantes del 213, 160 y 133 por ciento, respectivamente.En este apartado solo han mejorado sus porcentajes
Ceuta, un 63,2 % (1,8& en 2020),
Aragón, un 51,1 % (2,1%) y
Castilla-La Mancha, un 17,3 % ( 10,5 %).
Dificultades para tener un ordenador
En cuanto a la posibilidad de
tener ordenador en casa, de nuevo Canarias, entre las comunidades autónomas, tiene el mayor porcentaje de población que no puede permitírselo por cuestiones económicas, el 11 %. Ceuta supera esta cifra con un 13,1 %.En todas las comunidades ha empeorado este índice excepto en País Vasco, que ha bajado un 36,5 % (2,6 %); Ceuta, un 27,6 % (13,1 %) y Castilla-La Mancha, un 24,6 % (5,2 %).