Una gran masa de aire que proviene del Sáhara elevará las temperaturas en algunas islas hasta los 37 grados. Este lunes la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) alertó de la llegada del calor a Canarias con apertura de claros por la tarde en las zonas bajas del norte de las islas montañosas, mientras que en el resto el cielo estará poco nuboso o despejado. Lo cierto es que con presencia de nubes o no, el termómetro no deja de subir.
Además, se espera calima en altura sobre las islas más orientales por la tarde y temperaturas en ligero ascenso en el interior de Fuerteventura y de las islas centrales. Gran Canaria puede llegar a alcanzar los 37 grados en la zona oeste, sur y este de la isla redonda.
La temperatura por islas
- En Gran Canaria se declara el aviso rojo desde este lunes 10 de julio, hasta el viernes 14 en Mogán; hasta el sábado 15 de julio en San Bartolomé de Tirajana y Santa Lucía de Tirajana; y hasta el viernes 14 de julio en Agüimes, Artenara, Ingenio, La Aldea de San Nicolás, Tejeda, Valsequillo y Vega de San Mateo. La temperatura mínima en Gran Canaria la mínima será de 22 grados y la máxima de 27 grados.
- En Tenerife, el aviso rojo comenzará este miércoles 12 y estará en vigor hasta el viernes 14 en Arico, Arona, Fasnia, Granadilla de Abona, Guía de Isora, San Miguel de Abona y Vilaflor. La mínima es de 22 grados y la máxima de 30 grados.
- En La Gomera la mínima es de 23 grados y la máxima de 28 grados.
- En el caso de Fuerteventura, será desde este martes 11 y hasta el viernes 14 de julio en Pájara y Tuineje.
- En Lanzarote se espera una temperatura mínima de 22 grados y una máxima de 31.
- En Fuerteventura la mínima será de 22 grados y una máxima de 30 grados.
-
En El Hiero la mínima es de 18 grados y la máxima de 23.
Riesgo por incendios
Como consecuencia de las altas temperaturas se declara la alerta por riesgo de incendios forestales en Gran Canaria, Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro. El Gobierno, a través de la Dirección General de Seguridad y Emergencias, ha informado este lunes que la alerta comenzará este 11 de julio a partir de las 08:00 horas.
Se trata de una decisión tomada por la previsión de altas temperaturas, y en aplicación del Plan Especial de Protección Civil y Atención de Emergencias por Incendios Forestales de la Comunidad Autónoma de Canarias (INFOCA).
Recomendaciones generales
El Gobierno pide a la población que siga los consejos de autoprotección de la Dirección de Seguridad y Emergencias. Entre los consejos preventivos está el no tirar colillas ni cerillas encendidas, así como no lanzar artefactos que contengan fuego en el campo o terrenos. También recomiendan no dejar basura en el bosque, eliminar ramas que estén pegadas a la fachada de la casa, o tener preparadas algunas herramientas contra incendios. A su vez, se pide no acampar fuera de las zonas habilitadas al igual que mantener limpio el entorno.
Además la Dirección también recomienda una serie de actuaciones si se tiene animales en casa, como por ejemplo revisar si está identificado por si es necesario alojarlo en zonas provisionales, tener preparada una mochila de emergencia con trasportín plegable, la documentación o recipientes con agua y comida, así como valorar que cualquier familiar o amigo pueda hacerse cargo de él.
¿Qué hacer si el fuego llega por sorpresa?
En general, y en el caso de que el fuego llegue por sorpresa, se aconseja mantener la calma y seguir las indicaciones del 112, bajar los interruptores de la luz y del gas en caso de desalojo, así como coger documentación importante, dinero o medicamentos. Por otro lado, y si el fuego rodea la casa, se recomienda mantenerse en el interior cerrando puertas, ventanas y tapando cualquier agujero llenando de agua bañera y fregaderos.
También se deben apagar todos los suministros, protegerse con ropa de algodón o dejar las luces encendidas si hay mucho humo. Además se recomienda usar un solo vehículo para evacuar, salir con tiempo suficiente y seguir las rutas recomendadas para llegar al punto de encuentro. En el caso de estar en el campo, hay que alejarse en dirección opuesta al viento y, si puede, entrar en zona ya quemada, así como tarparse la cara con un pañuelo mojado.