¿Qué fue del castillo que da nombre a la calle más comercial de Santa Cruz?

Los vestigios de esta histórica construcción para la defensa de la capital tinerfeña afloraron durante las obras de remodelación de la Plaza de España en 2006

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Calle Castillo, una de las principales zonas comerciales de Santa Cruz de Tenerife (Canarias)./ AH
Calle Castillo, una de las principales zonas comerciales de Santa Cruz de Tenerife (Canarias)./ AH

A lo largo del litoral santacrucero poco más de tres kilómetros separan el Castillo de Paso Alto del Castillo Negro o de San Juan Bautista, lo que durante siglos hubiera supuesto una amplia zona expuesta a las amenazas que, en forma de navíos enemigos, pudieran surgir desde el Atlántico. Aunque a dia de hoy sus restos se encuentren bajo tierra, el Castillo de San Cristóbal fue la primera defensa de la capital tinerfeña, a mitad de camino entre Paso Alto y San Juan. 

Precisamente esta fortificación defensiva le da nombre a la calle Castillo, una de las principales vías de la ciudad por su actividad comercial y ubicación céntrica. Desde su construcción en 1576 hasta que fue derruido en 1928, el Castillo de San Cristóbal servía como punto de referencia del frente marítimo, lo cual explica que le cediera el nombre a la calle que desembocaba en la fortificación.

Aunque la denominación popular haya prevalecido hasta convertirse en oficial, a lo largo de los años la calle Castillo ha tenido distintos nombres de manera que desde 1906 hasta 1932 la vía se denominó Alfonso XIII mientras que, entre 1932 y 1936, homenajeaba al militar español Fermín Galán. A partir de ese año recuperó su nombre tradicional. Y hasta hoy. 

Vestigios bajo tierra

A conscuencia de las obras de remodelación de la Plaza de España, en junio de 2006 aparecieron en el subsuelo vestigios del muro perimetral del Castillo de San Cristóbal. Dada la importancia histórica del hallazgo, el Museo de Historia y Antropología de Tenerife habilitó en este emplazamiento el Centro de Interpretación "Castillo de San Cristóbal" en una galería subterránea a la que se accede desde la Plaza de España (conentrada gratuita de lunes a sábado de 10 a 18 horas).

Allí se divulga el sistema defensivo que tuvo la Isla, formado por los tres construcciones mencionadas -San Cristóbal, San Juan y Paso Alto- así como por fortificaciones como la de San Andrés o, más allá de la capital, en castillos como el de San Felipe, en el Puerto de la Cruz; o el de San Miguel, ubicado en Garachico.

Donde descansa "El Tigre"

Asimismo, desde julio 2009 el Centro de Interpretación "Castillo de San Cristóbal" dispone de un atractivo añadido: el mítico cañón de bronce El Tigre. Esta pieza de artillería del siglo XVIII, realizada en un taller sevillano, de unos 3 m de largo y 2.000 kg de peso es reconocida por la tradición popular como el cañón qyue hirió al famoso almirante inglés Horacio Nelson, arrebatándole un brazo.

Símbolo de aquella gesta, esta pieza ha pervivido en la memoria del tinerfeño desde aquel 25 de julio de 1797 y se ha mantenido a lo largo del tiempo como una de las más poderosas metáforas y alegorías del valor; así como de los sentimientos del pueblo de Tenerife. Se trata de un emblemático bien patrimonial que fue trasladado desde el Museo Histórico Militar de Canarias a su actual emplazamiento para ser expuesto en una sala acondicionada.

Por supuesto, además de analizar los puntos de la defensa de Santa Cruz y albergar el cañón más célebre de la historia de Tenerife, el proyecto expositivo desgrana la historia del propio Castillo de San Cristóbal, desde su edificación hacia a finales del siglo XVI hasta su demolición en el primer tercio del XX. Inlcuso en la superficie, a modo de testimonio de la antigua edificación, podemos contemplar la silueta de su planta en el piso del lago que actualmente ocupa parte de su emplazamiento.