Cae la mayor red de narcoveleros del mundo que tenía a Canarias como punto logístico

Hasta 50 personas han sido detenidas en ocho países en una operación que se ha prolongado cuatro años

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Droga incautada en la macrooperación de narcoveleros entre Europa y América. / POLICÍA NACIONAL
Droga incautada en la macrooperación de narcoveleros entre Europa y América. / POLICÍA NACIONAL

Una macrooperación policial entre Europa y América ha conseguirdo desarticular la "mayor organización de narcoveleros del mundo", que tenía a Canarias como punto logístico del narcotráfico de cocaína. Hasta 50 personas han sido detenidas en ocho países en una operación que ha involucrado a la Policía Nacional, agentes noruegos de la NCIS, la agencia norteamericana DEA, la agencia británica NCA, el MAOC europeo y que ha contado con el apoyo de Europol, y que se ha prolongado cuatro años. 

Según ha informado la Policía Nacional en un comunicado, esta operaación ha permitido desarticular la mayor red de narcotráfico que usaba veleros para operar entre Sudamérica y Europa. En total han sido detenidas 50 personas y se han llevado a cabo 47 entradas y registros en España (28) y en siete países –Noruega (13), Bulgaria (1), Reino Unido (1), Panamá (1), Trinidad y Tobago (1), Portugal (1) y Colombia (1)-.  Durante la intervención, según apunta la policía, se han intervenido 1.500 kilos de cocaína así como ocho embarcaciones, 36 vehículos y más de 85 terminales telefónicos.

Comienza la operación

Según el relato policial, la investigación se inició en junio de 2020 conjuntamente con las autoridades de Reino Unido, al detectar una organización británica asentada en España, que contaba con canales de comercio internacional de tráfico de cocaína desde Sudamérica a Europa a través de España. Fruto de la investigación se descubrió que los integrantes de la red contaban con un "conglomerado de embarcaciones a su disposición, que registraban a nombre de terceras personas para tratar de ocultar sus ilícitos fines".

A raíz de la investigación se averiguó que la organización criminal operaba en Canarias, en concreto en las islas de Tenerife, Gran Canaria, El Hierro y Lanzarote, desde donde establecían "narcorrutas" hasta Sudamérica. Además, indica la policía que desde el sur de la península "los responsables de la organización coordinaban y dirigían los transportes de cada embarcación y, en sus entornos de seguridad, mantenían las reuniones con los enlaces de los países de origen desde donde se suministraba la sustancia estupefaciente".

El líder

Añaden desde el cuerpo policial que el líder de la organización, conocido como El profesor, reclutaba a los tripulantes de los veleros y a partir de ese momento, otro responsable de la organización, se encargaba de mantenerlos. "El líder, que se presume que llevaba operando en el narcotráfico más de 20 años, contaba con la confianza plena de los cárteles colombianos y mejicanos, con los que coordinaba la producción del estupefaciente y su traslado por Sudamérica hasta poder embarcarlo rumbo a España. La investigación permitió detectar que el dinero generado por los cargamentos de estupefacientes, eran reinvertidos en nuevas operaciones y blanqueado a través de un tejido empresarial que operaba en varios países", indica el comunicado.

La nota añade también que en la Costa del Sol, la organización criminal, compuesta por activos miembros pertenecientes al “Balkan Cártel”, llevaban un elevado nivel de vida y operaba con negocios empresariales que permitían dar salida a los beneficios que obtenían de su actividad ilícita. Durante la investigación se identificaron 10 embarcaciones de la organización en bases en España y Sudamérica. Como puntos logísticos nacionales, la red operaba en Valencia, Alicante, Almería, Málaga y Canarias. 

Comunicación

Según el relato de la policía, "las comunicaciones de la organización para estas operaciones, se realizaban con sistemas cifrados de seguridad que les brindaban la oportunidad de mantenerse a salvo de observaciones policiales, disponiendo en las cotas más altas del entramado, de hasta 15 terminales telefónicos cada uno".

También informan de que una vez conocida la estructura criminal, los agentes detectaron la preparación de dos veleros que iban a recibir más de 1.000 kilos de cocaína cada uno, por lo que se estableció una acción preventiva para evitar que se llevara a cabo la carga en aguas internacionales y se solicitó auxilio judicial en numerosos países -Noruega, Bulgaria, Portugal, Reino Unido, Panamá, Santa Lucía, Trinidad y Tobago- junto con actuaciones en Francia, Polonia o España.

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