El presidente en funciones del Cabildo de Tenerife, Pedro Martín, junto al consejero en funciones de Agricultura, Ganadería y Pesca, Javier Parrilla, visitaron esta mañana el depósito de aguas de Güímar y la planta de desalinización para conocer el estado de los trabajos que se están realizando para la introducción progresiva de agua regenerada para el regadío en el municipio.
Pedro Martín aclaró que la visita se ha organizado para comprobar el avance del proyecto, que permitirá incorporar agua regenerada en condiciones de calidad para el regadío. Con una mayor eficiencia energética, una solución alternativa en tanto se avanza en la construcción de una nueva red de regadío y de una balsa en el municipio, infraestructuras previstas en el Plan Hidrológico de Tenerife, dijo.
Mejora de instalaciones hidráulicas
El presidente insular en funciones indicó que “estos últimos años el Cabildo ha tenido como objetivo la mejora de las instalaciones hidráulicas. Se han ampliado redes, impermeabilizado depósitos y balsas, entre otras actuaciones. En la Isla Baja se ha estado trabajando para conseguir un aumento del agua disponible desalada y acabamos de instalar una planta de desalinización para reforzar los recursos hídricos en esta zona, y que el sector primario pueda disponer de agua de calidad y en cantidad”.
Javier Parrilla, por su parte, aclaró que, a través de esta actuación, se aprovechará el agua regenerada de la depuradora de Santa Cruz, que se transporta actualmente hasta el complejo hidráulico de Valle de San Lorenzo (Arona), para llevar un volumen diario al depósito de Güímar.
El depósito
En ese depósito se ha instalado una planta de ósmosis inversa, con el objeto de mejorar la calidad del agua en cuanto a contenido de sales, para que pueda ser suministrada para riego en unas condiciones de calidad adecuadas, explicó. Se trata de una planta innovadora, con membranas de ósmosis inversa de bajo ensuciamiento, que se ha estado probando de manera experimental en el complejo hidráulico de Valle San Lorenzo, dando buenos resultados en la fase de prueba inicial. La planta contenerizada ya se ha trasladado a su ubicación prevista, junto al depósito de Güímar, y se avanzará en las conexiones y pruebas hidráulicas necesarias para la puesta en servicio.
Javier Parrilla señaló que “su ejecución responde al compromiso adquirido este mandato, bajo la presidencia de Pedro Martín, de dar respuestas reales, efectivas y prácticas al sector, ajustadas a sus demandas, y por las que no tengan que esperar, ni demorarse mucho en el tiempo”.
400 hectáreas de cultivo
En lo que respecta a la balsa reguladora de aguas regeneradas del Valle de Güímar, recordó que estará situada entre el Barranco de Yoquina y Camino El Portugués, y contará con una capacidad de 99.451 metros cúbicos. Su primera fase permitirá suministrar a 400 hectáreas de cultivos presentes y a 390 hectáreas de superficie agrícola abandonada.
Respecto a la red de riego, la misma se extenderá a lo largo de 46.000 metros, con diferentes ramales y diámetros en las conducciones. Para su diseño se han determinado las necesidades de riego de las explotaciones, para ajustarla a las necesidades detectadas, tanto de caudal como de presión. También se ha calculado la demanda de los meses de mayor consumo, sobre todo en el periodo estival.
Se contó también con la asistencia de la gerente de Balten, Ana Sánchez, el técnico Juan Antonio Medina, y la jefa de servicio de la empresa Tedagua, Jésica Calvo.